La Universidad Permanente de la UA participa como invitada en la Semana Mundial de la Educación Superior 2022
La directora de la Universidad Permanente de la Universidad de Alicante (UPUA), Marián Alesón, participa en la Semana Mundial de la Educación Superior 2022, que se celebra en Barcelona, por invitación del Ministerio de Universidades y del Servicio Español de Internacionalización de la Educación (SEPIE). La UPUA, como representante de los programas universitarios de mayores, ha compartido sus buenas prácticas y su larga trayectoria en la formación a lo largo de la vida en una mesa redonda titulada “Las universidades como instituciones de aprendizaje a lo largo de la vida: políticas y prácticas inspiradoras”. Estas jornadas, que se celebran en el marco de la Conferencia Mundial UNESCO de Educación Superior 2022, tienen como finalidad debatir sobre el futuro y los retos de las universidades, así como compartir ideas innovadoras, conocimientos y posibles nuevas alianzas para la comunidad de Educación Superior a favor de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
En este marco, la aportación de la UPUA subraya la importancia de que las universidades se impliquen cada vez más en el aprendizaje a lo largo de la vida y en la formación de las personas de todas las edades, incluyendo de forma especial a los adultos mayores para conseguir, como objetivo final, una mejor inclusión y vertebración social. Tal y como señala su directora “Los programas universitarios de mayores demuestran la importancia de que la universidad ofrezca a la sociedad la formación necesaria para que las personas de todas las edades, jóvenes y mayores puedan adaptarse a los cambios, vivir mejor y seguir siendo útiles, participativos y significativos en el mundo que nos rodea independientemente de la edad”.
La profesora Alesón ha explicado durante su intervención el hecho de que las buenas prácticas que se llevan realizando en los programas de mayores ya han avanzado en programas de enseñanza más flexibles “que inciden en la mejora de las capacidades de los alumnos y en la necesidad de adquirir nuevas competencias y habilidades para seguir participando activamente en la sociedad, bien como profesional o como ciudadano en activo”. Asimismo, la directora de la UPUA ha subraya que el alumnado que vuelve a las aulas universitarias, o que llega a ellas tras una trayectoria profesional determinada, es un alumno que aporta experiencia y conocimientos y que necesita de otra metodología de aprendizaje, razón por la cual las universidades deben afrontar este nuevo reto facilitando el acceso del conocimiento a aquellos que lo necesiten. “El verdadero desafío está en cambiar el enfoque hacia la realidad de una sociedad que necesita aprender y actualizarse al ritmo en el que evoluciona el mundo y que no se puede contentar con lo aprendido a los veinte años cuando uno finaliza su formación reglada. La universidad debe transformarse, adaptarse a los cambios y ser más flexible para poder dar respuesta a los ciudadanos”, asegura Marián Alesón.
La directora de la UPUA ha destacado, además, el trabajo que se está realizando desde los programas universitarios para mayores y desde de los proyectos de innovación metodológica (como los proyectos Erasmus+ Crocodile, el In-cult, o el Heim), que abren nuevas posibilidades de futuro. Uno de estos es el sistema de micro-credenciales, que permitirá acreditar a nivel europeo los conocimientos y nuevas habilidades adquiridas a través de cursos universitarios de corta duración. Este sistema ofrece a los profesionales un acceso más flexible y adaptado a la formación universitaria, a la innovación y a los avances científicos. “De esta forma, la universidad se transforma, se rentabiliza y se hace más útil y presente en la sociedad; por ejemplo, enfocando el aprendizaje y la transmisión del conocimiento no sólo hacía la formación de futuros profesionales, como hasta ahora se ha hecho, sino también hacía todas las personas que necesiten en algún punto de su vida reciclarse, poner al día sus conocimientos o cambiar de rumbo profesional o de actividad”, según ha contado Alesón, quien afirma que “los programas universitarios de mayores, enfocados a ofrecer la posibilidad de acceder a la formación universitaria a los mayores de 50 años, son los mejores laboratorios donde se han podido poner en práctica estas nuevas metodologías de aprendizaje. Metodologías que fomentan la participación del estudiante, la adquisición de nuevas competencias, la actualización de las ya adquiridas y la puesta en práctica del conocimiento en el mundo que nos rodea”.
