Para reflexionar

Me sorprende la estrategia adoptada por la oposición, que se reitera en su actitud de pataleta infantil, amenazadora y vengativa. Los últimos titulares para desacreditar, sin argumentos, al equipo de gobierno en l’Alcora, invitan seriamente a la reflexión. Los que nos acusaban de no tener una hoja de ruta, demuestran que son ellos quienes navegan a la deriva. Unos manifestando abiertamente que prefieren continuar con la línea del endeudamiento, porque no ven prioritario saldar la deuda contraída con los bancos, y otros, porque se apropian de enmiendas ajenas, subiéndose al carro de una política fácil y cómoda, donde unos pocos trabajan y otros se cuelgan las medallas. ¿Esta oposición es la que quiere gobernar? ¿Dónde estamos? ¿Ante una tiranía que impone su abuso porque sí, en un intento de demostrar su superioridad?, o ¿ante una democracia sensible a llegar a acuerdos entre los representantes elegidos por el pueblo? Sería interesante indagar en el archivo y ver cuántas veces se ha aprobado un presupuesto por unanimidad. Nosotros lo hemos conseguido en esta legislatura, teniendo en cuenta las propuestas de todos los grupos, y si algunas no se han puesto en práctica, ha sido por cuestiones de ilegalidad, atendiendo a los informes desfavorables de Intervención -que tanto sirven de referencia cuando algunos les conviene-, o bien porque otros, no asumieron su compromiso en el momento en que se delegó en ellos. Esto ha pasado con las ayudas al transporte. Es muy fácil proponer y que otros trabajen, mientras los propios interesados se evaden de realizar gestiones. Señores, es momento de arrimar el hombro y trabajar por l’Alcora. Sigo apostando por la democracia y creo que el llegar a entendimientos por el bien de la ciudadanía, es posible.