Delincuencia juvenil en la actualidad

Un menor de quince años fue condenado por “instigar un ataque yijadista”, el hecho, hay que reconocer que es de suma gravedad, dado el momento que se vive en la política internacional.

Todos estamos de acuerdo que ese hecho puede traer repercusiones de máxima alarma, que el bien jurídico que pone en peligro es la paz mundial, era una falsa amenaza que sí, debe ser castigada; pero tratándose de un adolescente hay que estudiar las circunstancias de los hechos.

No se puede aplicar la misma pena por el mismo delito a un menor que para un adulto, por muy grave que sea el hecho. Sí, crea alarma social, pero no por ello hay quee marcar la vida de un niño.

Cada país tiene un Derecho Penal diferente, y unas normas para los menores, algunas muy crueles; impropias de los tiempos en los que estamos. Existen tratados que pueden cambiar las políticas, pero estos no son vinculantes, no obligan a los estados a seguir unas pautas humanitarias.

Por otro lado, las nuevas tecnologías usadas por manos de menores que son vulnerables por personas desconocidas, capaces de proponerles cualquier cosa es muy peligro. Por eso los padres o tutores nunca deben dejar solo a un niño delante de un ordenador.

El caso antes mencionado, como ya he citado puede ser muy grave para la paz mundial, pero imaginemos que el menor accede a las cuentas de un gran banco, cambia una cifra secreta; puede ocasionar una crisis económica a gran escala.

Hay que vigilar bien a nuestros menores, evitando que indaguen en Internet sitios que no son apropiados para ellos. También se debe “humanizar” las Políticas Penales para Menores, que no sea una mancha de por vida para el menor, y que este pueda realizar una vida normal en el futuro.