La UA prueba en el Puerto de Alicante un prototipo de arrecife artificial para la protección y restauración de fondos marinos
Esta tecnología, que ya se ha patentado, permite la restauración de ecosistemas marinos, la purificación de aguas marinas en las inmediaciones de las estaciones de acuicultura, así como una explotación sostenible del ocio marino
Un grupo de investigadores multidisciplinar de la Universidad de Alicante ha desarrollado un prototipo de arrecifes artificiales electrolíticos probado con éxito en el Puerto de Alicante. El sistema se basa en una estructura metálica ligera con recubrimiento calcáreo poroso que favorece la adhesión de organismos como larvas de invertebrados marinos y esporas de algas. Sobre estos soportes metálicos se realiza un proceso de electrólisis, es decir, se lleva a cabo la descomposición del agua (H2O) en oxígeno e hidrógeno por medio de una corriente eléctrica. “Durante este proceso se liberan al medio sustancias químicas inocuas para el hábitat marino que favorece la deposición de carbonato cálcico y el desarrollo de fitoplancton”, explican los investigadores de la UA.
Entre otras ventajas, esta tecnología permite la restauración de hábitats marinos degradados y la purificación de aguas en las inmediaciones de explotaciones de acuicultura, así como una explotación sostenible del ocio marino por su atractivo para el submarinismo recreativo. La diversidad biológica fijada a las estructuras carbonatadas por electrólisis ha resultado ser significativamente superior a la de estructuras metálicas sin recubrimiento. Por tanto, apuntan los investigadores, “se consigue establecer una mayor diversidad de especies marinas”. Además, el amplio volumen de la estructura genera espacios que facilitan la protección y el desarrollo de numerosos organismos”.
Otro aspecto innovador es que estas estructuras submarinas pueden tener cualquier forma geométrica -con posibilidad de ensamblaje-, y pueden montarse in situ reduciendo así los costes de transporte, montaje y fondeo.
Pruebas a escala
El equipo de trabajo formado por los investigadores Alfonso A. Ramos del Departamento de Ciencias del Mar y Biología Aplicada; Miguel Á. Climent y Pedro Garcés del Departamento de Ingeniería Civil; y Vicente Montiel del Instituto de Investigación de Electroquímica, llevó a cabo las primeras pruebas a escala de laboratorio en el año 2013. Durante los años 2020 y 2021, gracias a la colaboración de la Autoridad Portuaria de Alicante, han podido realizar ensayos con prototipos a una escala preindustrial, incluyendo estudios de fijación comparativos (carbonato-control) y estacionales de fauna y flora marinas sobre las estructuras.
Los estudios realizados por los investigadores de la UA confirman que el sistema no libera en el medio marino ninguna sustancia contaminante o tóxica y, tanto en el proceso de fabricación como durante la vida en servicio de las estructuras, se produce una contribución a la fijación de CO2. “Es importante señalar que el proceso de electrólisis se lleva a cabo utilizando corriente eléctrica suministrada por una fuente externa compatible con el uso de paneles solares fotovoltaicos”, destacan los investigadores.
Esta tecnología ya ha sido registrada en la Oficina Española de Patentes y Marcas bajo el título “Sistema para la formación de arrecifes artificiales y estructuras submarinas con recubrimiento calcáreo inducido por electrólisis” y se ha solicitado la extensión internacional de la propiedad intelectual.