‘Poder i santedat’ llega al Teatre Principal de Alicante

El director general del IVC, Abel Guarinos; el autor del texto, el dramaturgo Manuel Molins; y el director de la obra, Paco Azorín, también autor de la escenografía, han presentado en Alicante la producción propia ‘Poder i santedat’. 

La producción, como ha señalado Abel Guarinos, “es un acto de justicia con uno de los dramaturgos más prolíficos e importantes de las artes escénicas valencianas de todos los tiempos. Como es de justicia que este magnífico trabajo pueda ser disfrutado por los espectadores de las comarcas del sur, razón por la que llevamos la obra al Principal de Alicante”.

El director general del IVC ha destacado también la trayectoria de Manuel Molins, Premio de Honor de las Artes Escénicas de la Generalitat 2018: “Su obra es estudiada en todas las universidades de nuestro ámbito lingüístico, ha recibido multitud de galardones y ha sido representada y publicada profusamente, incluso ha empezado a editarse su obra completa, cuyo primer volumen se presentará la próxima semana en el Paraninfo de la Universitat de València”.

La obra, Premio Octubre de teatro Pere Capellà 2017, se centra en el juicio a un joven, Lucho Pacelli, de familia rica y vinculada al Vaticano, quien, después de salir del seminario y antes de ordenarse sacerdote, empieza a investigar y descubrir, junto a un grupo de amigos, entre ellos una teóloga, una serie de cosas que no le gustan: corrupción, abusos, pederastia. Además de entrar en una crisis de identidad.

Según el autor, Manuel Molins, “la historia se concentra en el Vaticano como podría situarse en otro lugar. Pero este Estado es especialmente significativo por ser el centro espiritual del catolicismo mundial al mismo tiempo que un nido de noticias contrarias a la fe y un enjambre de juegos de poder contrarios a la santidad. Acompañamos al joven protagonista en su búsqueda y asumimos los riesgos de la libertad: quizá creeremos menos en el poder y más en la bondad”.

Una verdad documentada y contrastada forma los elementos básicos que, según su autor, aborda ‘Poder y santedat’ (Els Àngels de Sodoma): “Mi obra es un texto de teatro muy documentado en diversos libros, reportajes, investigaciones tal como se puede ver en la edición donde están las notas de base de las escenas y una larga bibliografía” y ha añadido: “La obra dialoga con nuestro presente desde una mirada valiente y compleja, realizando un canto al amor, a la diversidad y a la tolerancia. Trata temas tan actuales como la bondad, el amor, la corrupción o la pederastia con el eje central de la libertad”. En palabras de su autor “este texto se mueve en el ámbito de la libertad porque ha indagado sobre la verdad plural y asume el riesgo de presentar toda una serie de temas demasiado vivos rehuyendo el escándalo o la denuncia fácil. Al contrario, nos sitúa en un contexto de reflexión para propiciar una nueva utopía”.

Paco Azorín, director y escenógrafo de este espectacular montaje, afirma que “es uno de los textos más complejos a los que me he enfrentado, es una obra que habla de todo, de la situación moral, política y ética. Es una enmienda a la totalidad, un obús a los pilares fundamentales del ser humano”

El director también ha agradecido el esfuerzo y la entrega de todo el equipo artístico, técnico y de producción y de los actores sobre el escenario, de los cuales destacado: “El texto exige un compromiso personal por parte de los actores que va más allá de lo profesional por las denuncias universales que contiene el texto”.

El espectáculo tiene una estética totalmente contemporánea. El escenario es como un gran juguete en el que todo se relaciona: los personajes se mueven en el espacio, por la luz y los movimientos de la imponente escenografía. Unos personajes que interpretan catorce actores y actrices: Borja López Collado, Victoria Salvador, Andrés Navarro, Pep Sellés, Joan Daròs, Lucía Aibar, Isabel Rocatti, Rafael Calatayud, Bruno Tamarit, Marta Santandreu, Àngel Fígols, Arantxa Pastor, el músico Guillem Duquette y el reconocido cantante y ‘freestyler’ Errecé. La banda sonora es de Damian Sánchez y el vestuario de Pascual Peris.