La Nau acoge la presentación del libro de Francisco M. Gimeno que reconstruye la conformación de la biblioteca de la UV
La biblioteca universitaria custodia una de las colecciones de manuscritos humanísticos más importantes de España
Mañana miércoles, 19 de octubre, se presenta en el Centre Cultural La Nau el volumen ?Ameu saviesa. Los libros de la Universitat de València?, una obra del catedrático de Ciencias y Técnicas Historiográficas de la Universitat de València, Francisco M. Gimeno Blay, en la que se reconstruye el proceso histórico de conformación de la biblioteca de la Universitat, que custodia una de las colecciones de manuscritos humanísticos más importante de España.
El libro, editado por la Universitat de València gracias a la colaboración de la Obra Social La Caixa, es un volumen de grandes dimensiones y de muy cuidado diseño, obra de Daniel Nebot y con fotografías de Mario Rabasco. El acto de presentación de ?Ameu saviesa. Los libros de la Universitat de València? estará presidida por el rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo y tendrá lugar en el Paraninfo del edificio histórico, a las 19 horas. En la presentación intervendrán el autor y María Luisa López-Vidriero, directora de la Real Biblioteca, que ha escrito el prólogo.
El libro ?Ameu saviesa. Los libros de la Universitat de València? narra y también ilustra a través de la reproducción de miniaturas, grabados, manuscritos, etc., los orígenes de la biblioteca de la Universitat de València, desde la creación hasta el siglo XX; un volumen a través del que la Universitat de València pretende dar a conocer su patrimonio histórico reconstruido a lo largo de siglos, caracterizadas por colecciones peculiares y muy diversas.
El nacimiento de la biblioteca de la Universitat se remonta a la donación, en 1785, de la biblioteca personal de Francisco Pérez Bayer. A lo largo del siglo XIX, sucesivas donaciones de profesores de la Universidad y de próceres valencianos enriquecieron notablemente los fondos bibliográficos. La desamortización de Mendizábal proporcionó un volumen importantísimo de libros procedentes de las instituciones eclesiásticas.
?En menos de 100 años, desde la donación de las obras por parte de Pérez Bayer hasta la aparición de la biblioteca de Medicina en 1891, la Universitat de València acumuló un patrimonio histórico ingente que permite a la institución disponer de una representación de toda la cultura universal en todos los dominios del saber. De manera que a día de hoy se puede leer en la Universitat obras de todas las disciplinas?, señala Francisco Gimeno. Pero además de la cantidad subraya el otro rasgo singular de las colecciones bibliográficas de la institución: ?La Universitat custodia obras elaboradas en los mejores centros de producción de manuscritos, españoles y europeos, y de los mejores impresores desde el siglo XV?.
Cuando en 1837 se abrió la biblioteca al público, los profesores y los alumnos disponían de una nutrida representación del saber. La Universitat de València poseía, a partir de ese momento, un amplísimo patrimonio bibliográfico en el que estaban presentes los autores más destacados de la cultura universal. Además sus anaqueles contaron con la producción de algunos copistas medievales y de los mejores prototipógrafos, impresores y editores europeos. Todos ellos han permitido a la comunidad universitaria disfrutar de las obras que atesora la Universidad. En este volumen, Francisco Gimeno reconstruye cómo se ordenaban los libros en esta biblioteca primigenia, una labor que ha sido posible gracias a la localización de un manuscrito de 1837, custodiado en el Archivo Histórico de la Universitat de València.
En la actualidad la Universitat de València posee más de un millar de manuscritos, que proceden en su mayoría de los conventos desamortizados. Esta es una de las colecciones más importantes de la biblioteca universitaria. Se alternan los clásicos griegos y latinos, biblias de lujo, obras en romance y literatura humanistica. Buena parte de estas obras están excepcionalmente ilustradas por los mejores iluminadores. La colección de incunables es igualmente notable.
El conjunto de impresos anteriores a 1500, los incunables, supera los tres centenares. Uno de los principales rasgos de este conjunto es la diversidad de materias que representan y de su excepcionalidad. Algunos son únicos en el mundo. La Universitat custodia las ?Obres e Trobes en lahors de la Verge Maria? (1474), la primera obra literaria impresa en España, escrita en idioma valenciano, o el ?Tirant lo Blanch? de Joanot Martorell, salido de las prensas de Nicolau Spindeler en 1490, y del que solo se conocen tres ejemplares en el mundo.
