Toni Hill: “Me gusta ponerme retos, intentar que cada novela sea distinta a la anterior”
El escritor es considerado una de las figuras más importantes de la literatura negra en nuestro país
Licenciado en psicología, aunque desde hace años se dedica a la traducción literaria y a la colaboración editorial en diferentes aspectos, Toni Hill, se postula como uno de los maestros en novela negra de España. Desde siempre ha sentido una gran atracción por este género, con el que lleva varios años de la mano escribiendo éxitos como El verano de los juguetes rotos o El oscuro adiós de Teresa Lanza. Además, su nombre se ha visto ligado a Valencia en los últimos tiempos, al convertirse en editor de la novela 'Grial', que se adentra en el enigma del santo cáliz de la catedral de Valencia.
Aunque claro, ¿Cómo una persona que estudia psicología empieza a escribir? “Supongo que en mí han coexistido siempre intereses diversos: uno es la mente humana, otro la literatura… No son los únicos, pero estos dos terminaron mezclándose” comenta el escritor.
Una carrera que en cierta manera le ha influido a la hora de escribir sus novelas: “Todo aquello que has estudiado o que ha sido objeto de tu interés siempre acaba ejerciendo alguna influencia en lo que creas, de la misma forma que tus lecturas, películas, viajes también van impregnando tu proceso creativo”.
A pesar de ser un novelista de reconocido prestigio, su método de escritura es sorprendentemente sencillo: "Es bastante simple, en realidad. Habitualmente escribo por las mañanas, bastante temprano. No obstante, una vez superada la mitad de la novela, esta me absorbe por completo y procuro dedicarle todo el tiempo disponible. Suelo escribir en casa, en silencio, sin música ni ninguna otra distracción".
Sin embargo, este método le ha llevado a conseguir numerosos éxitos y reconocimientos como el Premio Caja Negra 2024. De esta manera, la exigencia es mayor, ya que se espera lo mejor de alguien que sobresale en lo suyo: “La presión siempre ha estado aquí, conmigo. Es un tema personal: me gusta ponerme retos, intentar que cada novela sea distinta de la anterior. Creo que en las nueve novelas que llevo escritas hasta ahora he conseguido una obra variada y a la vez coherente, pero eso mismo genera presión para no repetirte, para encontrar nuevos argumentos y nuevas maneras de contarlos”.
Si bien, Toni Hill es elogiado por tantos, él también tiene autores a los que leer y con los que aprender. Un ejemplo de ello, se encuentra en la literatura valenciana, algo que conoce desde hace tiempo y que sigue: “Me encantó Noruega, de Rafa Lahuerta, por ejemplo”. De la misma manera, seguramente a muchos novelistas y lectores les pasará lo mismo pero con Hill. Sobre todo a raíz de su último libro, con el que cierra "La Trilogía del Verdugo”, cuya idea surgió “de un artículo sobre Nicomedes Méndez, un verdugo real que ejerció su labor en Barcelona a finales del siglo XIX y principios del XX. Sin embargo, también es cierto que yo llevaba mucho tiempo queriendo escribir sobre un psicópata asesino desde una perspectiva muy cercana a él y Nicomedes (con su garrote vil) fue solo la excusa que necesitaba para crear al personaje y lanzarme a ello”.
Con esta última publicación vuelve a demostrar porque es el mejor novelista del género negro, con el que mucha gente ha podido disfrutar de sus historias. Sin embargo, de aquí a su próximo libro aún quedará un poco dado que “merezco una temporada de descanso, aunque seguro que habrá nuevos proyectos y nuevas novelas más pronto de lo que yo mismo imagino” confirma Hill.