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Iniesta asume la destitución de Lema

  • Asegura que al técnico le faltaba conocimiento de la plantilla

Juan Antonio Iniesta, presidente del Alicante, asumió hoy la decisión de destituir a Nino Lema como entrenador del primer equipo, por encima del criterio del director deportivo Manolo Jiménez, al considerar que al ya ex técnico le faltaba conocimiento de la plantilla para poder sacarla de la zona de descenso en la que se encuentra.

Iniesta dijo haberse apoyado para tomar la decisión en el dato objetivo de que Lema sólo había sumado dos de quince puntos posibles, pero sobre todo por una opinión "subjetiva": "Lema no es el responsable de la situación, pero no tenía ni tiempo ni criterio, en cuanto al conocimiento profundo del vestuario, como para gestionarlo".

El máximo dirigente reconoció que antes de la incorporación de Lema -al que ha ofrecido formar parte de la secretaría técnica- había pedido al director deportivo Manolo Jiménez que entrenara al equipo y que en esta oportunidad lo había hecho con más contundencia hasta que recibió el visto bueno del técnico.

Destacó que Manolo Jiménez es el "máximo responsable deportivo" del Alicante y que consideraba que había llegado el momento de que "asuma su responsabilidad" para tratar de enderezar el rumbo de un Alicante que se encuentra ya a siete puntos de la permanencia en Segunda.

Resaltó que Jiménez es el técnico alicantino "con mejor curriculum" de los últimos años y que tiene "la capacidad para gestionar con éxito" la plantilla en estos momentos, cuando considera que su apuesta tiene "un cincuenta por ciento" de posibilidades de salirle bien.

"Tenemos la obligación de ser optimistas, de mantener la esperanza y no vamos a arrojar la toalla", manifestó Iniesta, quien incidió en varias oportunidades en que no tiene la intención de dimitir de su cargo de presidente ni ha amenazado con ello.

Pidió a la afición "apoyo en la adversidad" y dijo no estar de acuerdo con aquellos seguidores que ven "el vaso medio vacío" porque, aunque admite que han podido cometer errores, militar en Segunda División tras 52 años es para ver el vaso medio lleno. "El año pasado el Barcelona era un equipo roto y ahora le llueven los elogios", comparó.

En cuanto a los jugadores, les pidió que hagan "una reflexión personal" sobre la situación del equipo. "Tengo confianza personal en la mayoría del grupo. Son capaces y son los últimos responsables de la situación actual y de lo que pase, como lo fueron el año pasado del mayor éxito del club -en referencia al ascenso-", comentó Iniesta.

"Al vestuario le hace falta rigor y compromiso", añadió el dirigente, "para conocer quiénes son" y la manera en la que deben gestionarse.

Respecto a la decisión de que Manolo Jiménez sea el entrenador, después de que hace dos jornadas la afición pidiera su dimisión como director deportivo, consideró que es "la única manera posible" para Jiménez de "defenderse" de las críticas, "bajando a la arena". Además, aseguró que Jiménez le acompañará "hasta final de temporada".

Por último, defendió los numerosos cambios de entrenador en la plantilla ya que, según dijo, la destitución de José Carlos Granero "no fue por motivos deportivos" y Asier Garitano no llegó a ser el entrenador -aunque lo cierto es que estuvo tres semanas y llegó a tener ficha de primer técnico-, "porque no salió de su boca".

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