elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Valencià

Octavio Salazar: "Todos somos parte de la 'Manada'"

Octavio Salazar: "Todos somos parte de la 'Manada'"

    Las nuevas masculinidades y el papel de los hombres en el feminismo protagonizan la mesa redonda Homes per la igualtat organizada esta tarde por la Fira del Llibre. Participan en el encuentro Nuria Coronado (Madrid, 1971), autora de Hombres por la igualdad (Lo que no existe), un volumen que recoge el testimonio de “16 aliados del feminismo, referentes en diferentes ámbitos”; Octavio Salazar (Cabra, 1969), responsable de El hombre que no deberíamos ser (Planeta); y Ritxar Bacete, (Vitoria, 1973), que ha publicado Nuevos hombres buenos (Península).

    Respecto a la reciente y polémica sentencia por el caso de la Manada, Bacete resalta que “frente a las masculinidades tóxicas que hacen posible 'las manadas’, planteamos la figura de los hombres feministas y en transformación”. Para Coronado, la Manada “no es más que la demostración de que seguimos viviendo en una sociedad machista. Frente a ello debemos apostar por la sensibilidad y la educación en valores. La verdadera manada hemos de ser las mujeres que queremos reivindicar nuestra libertad”. “Todos somos parte de la Manada porque, aunque la mayoría no seamos violadores, formamos parte de una cultura machista donde seguimos teniendo una determinada concepción de la relación con las mujeres y del cuerpo y la sexualidad femenina”, remata Salazar.

    Como explica Coronado, gracias a su libro ha conocido a hombres “que son aliados porque caminan a nuestro lado en una causa tan necesaria y tan justa. Son conscientes de que sin su colaboración y sin su compañía, las mujeres estaríamos demasiado solas”. Por su parte, Bacete señala que esos ‘hombres buenos’ de los que habla en su texto son “individuos conscientes de sus privilegios, que renuncian al ejercicio del poder y la violencia. Son hombres tiernos, cuidadores y que son capaces de mostrarse vulnerables”.

    Una de las cuestiones en la que los tres autores coinciden es que mientras que en los últimos años se ha producido una revolución en el papel de la mujer en la sociedad, el rol del hombre ha quedado algo difuso. “Los hombres estamos en un momento de crisis, ya que las mujeres han dado pasos de gigante en cuanto a su lugar en el mundo y su identidad, mientras que los hombres estamos manejando todavía referentes que vienen del pasado y algunos no tienen muy claro hacia dónde nos tenemos que dirigir”, señala Salazar, quien considera que “faltan estrategias y claves para construirnos de otra manera. Hay que poner el foco en cuántos privilegios tenemos los hombres por ser hombres y proponer alternativas. Debemos reconciliarnos con las emociones y habilidades que históricamente se han considerado femeninas y de las que hemos huido”. En ese sentido, Bacete destaca que “el feminismo ha venido a liberar también a los hombres, a regalarnos la posibilidad de ser quienes somos realmente”.

    La figura de los hombres feministas genera controversia, pues pueden restar visibilidad a las mujeres en su propia lucha. En este sentido, Salazar defiende que las mujeres “deben ser las protagonistas, pero nosotros hemos de ser cómplices de esa batalla y dirigirnos a los otros hombres para hacerles ver que tienen que ponerse las gafas violetas”. “Necesitamos hombres que se quieran arropar con la bandera del feminismo y se sientan orgullosos de ello”, opina Coronado.

     

    Subir