El Museo de Bellas Artes de Valencia reúne obras de 30 maestros del entresiglos en una exposición
La muestra permanecerá hasta el 28 de octubre
Las obras de Joaquín Sorolla e Ignacio Pinazo, junto con el también valenciano Muñoz Degraín, constituyen la base sobre la que se gesta la importantísima renovación de la pintura valenciana de la época del entresiglos. En torno a ellos surgen gran cantidad de artistas que superan los caducos planteamientos estéticos anteriores y desarrollan su propio estilo.
La importante colección de pintura del XIX y del XX que posee el Museo de Bellas Artes de Valencia ha permitido configurar una exposición que profundiza en la investigación sobre uno de los periodos artísticos más destacados en la historia de la pintura.
La muestra ‘Pintores de entresiglos’ que permanecerá abierta hasta el 28 de octubre en el San Pío V ha seleccionado 50 piezas de 30 artistas de primera fila nacional junto a otros cuya obra ha sido menos estudiada dentro de los fondos del museo.
Así destacan las obras de Sorolla, Ignacio y José Pinazo, Agrasot, José Benlliure, Benedito, Beruete, Peris Brell, Fillol, Pradilla, Cecilio Pla, Anglada Camarasa, Regoyos y Zuloaga entre otros.
La mayoría de los pintores contaron con una formación común y una trayectoria profesional similar, formándose en las Escuelas de Bellas Artes, y posteriormente obteniendo pensiones para ampliar estudios en Paris o Roma, donde observaron otras corrientes plásticas del momento que provocaron en ellos un cambio sustancial en la manera de concebir el arte. También coincidieron en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, con lienzos de gran formato que se exhiben ahora como “Floreal” de José Pinazo o “La Gloria del Pueblo” de Antonio Fillol (1895).
Temáticas
La exposición resalta algunos de los temas más recurrentes en la pintura de la época: retrato femenino; retrato de niños; paisaje; pintura costumbrista y pintura social o realismo social.
Entre las obras más destacadas se encuentran en el apartado del retrato femenino ‘Retrato de doña Ana Colín y Perinat’ de Emilio Sala, una de las obras más valoradas por la crítica, o ‘La mosca’ de Cecilio Pla; del retrato de niños destaca la ‘Academia del natural (niño)’ (1887) de Joaquín Sorolla.
En el apartado del paisaje se pueden apreciar obras de gran calidad, gracias a la donación de Pere Mª Orts como los cuadros ‘Sierra Nevada’ (1910) de Sorolla o el ‘El Mönch’ de Beruete, gran pintura realizada al natural en uno de los viajes del artista por Europa, además se exhibe el cuadro titulado ‘Jardín’ de Ignacio Pinazo.
Dentro de las obras de tema costumbrista destaca ‘Oyendo misa (Rocafort)’ de José Benlliure por la minuciosidad con la que retrata a los personajes. El cuadro ‘Después de la refriega’ de Antonio Fillol es uno de los más representativos de la pintura social de la exposición.
