Apicultura urbana: Valencia busca sensibilizar a la ciudadanía “de la importancia de las abejas en el entorno urbano”
Campillo destaca la importancia de las abejas, «fundamentales tanto para la polinización como para la diversidad biológica»
La concejalía de Ecología Urbana ha firmado un convenio de colaboración con la Asociación Valenciana de Apicultura Urbana (AVAU) para desarrollar un proyecto de apicultura urbana junto a los huertos del Parque de La Rambleta, en un terreno que cederá el Ayuntamiento. "El objetivo es sensibilizar a la ciudadanía de la importancia de las abejas en el entorno urbano, tanto para la polinización como para la diversidad biológica, y difundir la práctica de una apicultura urbana ecológica", ha explicado el vicealcalde y responsable del área, Sergi Campillo.
El Organismo Autónomo de Parques y Jardines Singulares, que depende de la concejalía de Ecología Urbana, cederá el uso temporal de un solar junto a los huertos urbanos del Parque de La Rambleta para la instalación de colmenas para las abejas y realizar talleres de apicultura urbana, el primero del cual será con las entidades vecinales de la zona. «El Ayuntamiento de Valencia gestiona y mantiene varias colmenas en espacios municipales como parte de su estrategia de fomento de la biodiversidad urbana. Por tanto, este es un nuevo proyecto que se suma a los que ya están en marcha para fomentar la apicultura urbana», ha recordado el vicealcalde Sergi Campillo.
El convenio que han firmado la concejalía de Ecología Urbana y la Asociación Valenciana de Apicultura Urbana establece una serie de compromisos, como ofrecer ayuda y asesoramiento a la ciudadanía que quiera empezar a ejercer la apicultura urbana en su jardín o terraza, de acuerdo con las ordenanzas y normativas establecidas para ello.
También busca facilitar los intercambios entre las personas socias de la AVAU de experiencias y herramientas de manejo y extracción con otras asociaciones y organismos, como el Observatorio Municipal del Árbol de Valencia. Está previsto que se compren y se pongan en común materiales y tratamientos necesarios para la gestión ecológica de las colmenas, como en el caso de la 'varroa'.
Otro de los pilares fundamentales será la realización de talleres educativos para divulgar y fomentar la apicultura urbana y el mundo de las abejas a todos los niveles, desde el nivel infantil hasta las universidades, con la colaboración de expertos de los diferentes sectores profesionales. «La primera iniciativa didáctica queremos que se haga con las asociaciones vecinales y entidades de Sant Marcel·lí y los barrios cercanos, porque es importante que el tejido social conozca la importancia de las abejas en la biodiversidad urbana», considera el concejal de Ecología Urbana.
El convenio también especifica que debe utilizarse la apicultura urbana como herramienta de integraciónen el empleo, y fomentar la formación de nuevos apicultores para cubrir la demanda actual de esta profesión.
La duración máxima de este convenio se establece en 2 años, prorrogable a 2 años más. Antes de finalizar cada año se efectuará una evaluación por el equipo de trabajo para continuar con el convenio, adoptando medidas correctoras.
