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El Poble Nou de Benitatxell reúne a un centenar de encajeras de la comarca en un encuentro de bolillos, vainica y tul

El Poble Nou de Benitatxell reúne a un centenar de encajeras de la comarca en un encuentro de bolillos, vainica y tul
  • Participantes de toda la comarca e incluso de Gandia y Ontinyent disfrutaron de una jornada agradable de convivencia con merienda y cena popular

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El Poble Nou de Benitatxell reúne a un centenar de encajeras de la comarca en un encuentro de bolillos, vainica y tul - (foto 2)
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La Asociación de las Amas de Casa del Poble Nou de Benitatxell reunió a un centenar de encajeras de la comarca en el XII Encuentro de Bolillos, Vainica, Tul, Patchwork y Bordado el pasado sábado, 30 de junio, en la calle La Paz. La nueva directiva de las amas, cuya presidenta es Marisa Pascual, recuperó el pasado año esta jornada que llevaba siete años sin celebrarse. El éxito de la edición de este año consolida un encuentro que goza de gran popularidad y larga tradición en el municipio. Solo en El poble Nou de Benitatxell hay más de 40 encajeras que asisten a las clases de bolillos y otras modalidades de artesanía que organiza la Asociación de las Amas de Casa. En el encuentro participaron también las maestras Teresa Buigues, de bolillos, Ana Bolufer, de tul y Pepita Mayans, de vainica. Participantes de toda la comarca e incluso de Gandia y Ontinyent disfrutaron de una jornada agradable de convivencia con merienda y cena popular.

 

Los beneficios para la salud

"Hacer bolillos es una terapia conveniente para matar el estrés. Esta afición del encaje requiere un gran nivel de concentración y agilidad mental. Está recomendada su práctica tanto a enfermos de Alzheimer como a adolescentes con hiperactividad. También es muy apropiado como remedio al insomnio. Cuando se practica en grupo, como hoy, aumenta la sociabilidad de las personas. Por tanto, favorece la sociabilidad" apuntó Marisa Pascual, presidenta de las Amas de Casa.

«El encaje de bolillos es terapéutico, relaja, hace que te olvides de todo y además creas cosas bonitas. Cuando se produce el silencio, el sonido del choque de los bolillos se escucha como un analgésico. La calidez del sonido varía dependiendo del material de los bolillos, hueso, boj, pino, et, pero, eso sí, todos son relajantes" explicó Teresa Buigues, maestra de encaje de bolillos en El Poble Nou de Benitatxell.

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