El incendio de la Vall d’Ebo sigue avanzando y obliga a evacuar cinco pueblos más
Los vecinos de Tollos, Fageca, Famorca, Beniaia y Vall d’Alcala han tenido que dejar sus casas esta tarde
El incendio iniciado este sábado a raíz de un rayo en el municipio alicantino de la Vall d’Ebo ya se ha convertido en el peor del año en la Comunitat Valenciana, al superar las 9.500 hectáreas calcinadas en un perímetro de 65 kilómetros.
La magnitud del fuego ha obligado ya a evacuar a más de 1.200 personas. Los últimos, los vecinos de la zona de Tollos, Fageca, Famorca, Beniaia y Vall d’Alcalà, que han tenido que ser desalojados por la Guardia Civil este lunes por la tarde, ante un frente de llamas que avanza hacia el suroeste, en dirección a la Vall d'Alcalà y El Comtat. Los nuevos evacuados han sido realojados temporalmente en el municipio de Muro d'Alcoi.
Tras dos jornadas de lucha contra el fuego, el incendio cuenta con tres frentes que siguen activos y que han saltado desde la Vall d’Ebo hasta la Vall d’Alcalà y que amenazan también a Pego, la Vall de la Gallinera y la Vall de Laguart.
7 minuts d'incendi. Ací no hi ha res a fer. Tota la nostra està condemnada al foc 😭❤️🩹#IFValldEbo#Diàniapic.twitter.com/SBQ5brJAAP
— Javier Miró (@Javiermiroo) August 15, 2022
De hecho, según ha explicado el director general de Emergencias, José María Ángel, en una entrevista en Àpunt, los esfuerzos se centran este lunes por la mañana en que las llamas no saltaran a la Vall de Laguart.
Desde los bomberos, por su parte, han explicado que la mayor parte de los medios se encuentra en la carretera CV-700 para frenar el avance hacia La Vall de la Gallinera, la zona más comprometida durante las horas centrales del día.
Ángel ha explicado que el control del incendio sigue siendo complicada debido a la orografía del terreno y al viento errático, que impulsa los frentes en diferentes direcciones.
Los primeros evacuados, de urbanizaciones de Pego, zonas de Castell de Castells, Benirrama, Benialí o Alcalá de la Jovada han sido reubicados en el Espai Veinal de Pego y no se descartan nuevos desalojos, en función del avance de las llamas.
De hecho, durante la noche, sobre las dos de la madrugada, se vivieron momentos de tensión cuando el fuego se aproximó a otro núcleo a viviendas en Adsubia. Según ha informado la Guardia Civil, se han desalojado 70 viviendas a lo largo de la noche.
Este lunes trabajan 15 helicópteros y aviones de la Generalitat, los bomberos de Alicante, el Ministerio y Castilla La Mancha para reforzar las tareas de extinción. Además, trabajarán sobre tierra una treintena de dotaciones del Consorcio Provincial de Bomberos y una quincena de brigadas forestales de la Generalitat.
🔥#IFValldEbo 15/08/2022
— educación forestal (@eforestal) August 15, 2022
Localización y posible extensión tomando como base imagen 🛰️#Sentinel3 de 🇪🇺@CopernicusEU de hoy.
Estaría afectado a unas 6500 hahttps://t.co/SlMS7MvSMTpic.twitter.com/kwWHExfMrL
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha llamado al president de la Generalitat, Ximo Puig, para ofrecerle toda la ayuda que sea necesaria para frenar este incendio que ya es el peor desde los que en el año 2012 calcinaron la provincia de Valencia
La parte positiva es que los servicios meteorológicos prevén una bajada de las temperaturas y un aumento de la humedad tras un fin de semana infernal.
El fuego se originó en la noche del sábado en una zona de pinos y vegetación en la partida de Frigalet, a consecuencia de un rayo.
Además de este incendio también preocupa el que está activo en el Alcalatén, que ha afectado a los términos municipales de Les Useres, Costur, Llucena y Adzaneta.
