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Teatres lleva ‘Por el placer de volver a verla’ al Teatro Principal

Teatres lleva ‘Por el placer de volver a verla’ al Teatro Principal
  • Miguel Ángel Solá y Blanca Oteyza protagonizan la obra de Michel Tremblay

Teatres de la Generalitat presenta ‘Por el placer de volver a verla’ que se representará en el Teatro Principal desde hoy 18 al 30 de enero. Tras el enorme éxito que provocó ‘Hoy: El Diario de Adán y Eva’ de Mark Twain, que se mantuvo durante más de 10 años en cartel en Argentina, Uruguay y España, llega otra historia de amor de sus mismos creadores.

‘Por el placer de volver a verla’ de Michel Tremblay, dirigido por M. González Gil y protagonizado por Miguel Ángel Solá y Blanca Oteyza. Nos cuenta el diálogo entre hijo y madre de una manera muy emotiva, basados en el recuerdo de esos momentos tan intensos que nos pasan en la vida.

En la obra, a través de sus recuerdos, Miguel, un reconocido autor teatral, va dibujando el perfil de una madre que, al fallecer joven, ha marcado la vida de su hijo y ha despertado en él la vocación teatral. Convertido en un famoso y reconocido autor y director cree que alguien se hace único cuando genera en otro el placer de volver a verlo. Para probar que es así, y dar sentido a su última pieza teatral, deberá contar con la mujer que hará que su nostalgia adopte el rostro de la felicidad. Ante el público -sumergiéndose en un pasado muy presente- iniciará un viaje al corazón abierto del teatro.

‘Por el placer de volver a verla’ comparte con ‘Diario’ la misma sensibilidad, el humor blanco sin golpes bajos y la capacidad de despertar emociones. La obra nos presenta a un reconocido autor teatral que nos propone aceptar que alguien es único cuando logra despertar en el otro el placer de volver a verle.

comentarios 4 comentarios
Rafael
Rafael
16/03/2011 11:03
Directo al corazón

Excelente interpretación y una obra que nos exige darnos más a la ternura, a la atención, al honrar la vida desde los lugares que uno se atreva a atesorar. Yo mantengo una relación muy parecida con mi madre; ella y sus ochenta y tres aún me dan batalla, preciosa batalla. Faltará alguna vez, pero, nunca faltará. Entiendo al autor, entiendo que decida inmortalizarla. Qué manera original y dulce halló. Rafael.

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