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Personas sin hogar podrán ser acogidas en Nochevieja en Valencia en una iniciativa impulsada por las Hijas de la Caridad

    El proyecto valenciano Rehoboth, para la atención de personas sin hogar, abrirá las puertas de su centro de acompañamiento durante el 31 de diciembre, con motivo de la Nochevieja.

    Se trata del único centro de acompañamiento en Valencia de baja exigencia y amplia acogida para los fines de semana, que atiende a personas sin hogar los sábados y domingos de 8 a 20 horas. Los usuarios son atendidos por un equipo de voluntarios guiados por educadores sociales que ejercen las funciones de coordinación.

    Igualmente, con motivo de las fiestas navideñas, el centro ha abierto sus puertas durante los días de Nochebuena y Navidad, "para acompañar a las personas sin hogar durante estas fechas tan señaladas", según han indicado fuentes de la organización.

    El proyecto Rehoboth surge de la Asociación Natania, hace ahora nueve años, impulsada por las religiosas Hijas de la Caridad de Valencia "ante la oración y la reflexión sobre la situación real de las personas sin hogar y los recursos existentes con los que contaban".

    La Compañía de las Hijas de la Caridad impulsó el proyecto y fue entidad asociada, hasta que en el año 2010 pasaron a ser entidad colaboradora. Es entonces cuando la asociación es asumida por laicos asociados provenientes del voluntariado tanto directo como indirecto, sensibles a la realidad de las personas sin hogar.

    El centro nace con el objetivo de ofrecer durante el fin de semana, servicios de ducha, consigna, lavandería, ocio, y alimentación ligera "a aquellas personas sin hogar que se hacen invisibles en nuestras ciudades, personas que caen en situaciones de degradación y necesitan ser escuchadas y recuperar la seguridad en sí mismas para avanzar en el camino hacia la integración".

    En concreto, "nuestro proyecto atiende a hombres y mujeres que por distintas circunstancias se encuentran viviendo en la calle, presentan situaciones graves de abandono personal y no aceptan acudir a otros recursos de la red por tener dificultades para cumplir con las normas de funcionamiento de los mismos", han señalado.

    Voluntariado

    Los requisitos para ser voluntarios son ser mayor de edad y "disponer de unas horas libres de tu fin de semana para dedicarla a aquellos que no tienen nada". En la actualidad el perfil del voluntario abarca desde jóvenes estudiantes a trabajadores, personas paradas y jubiladas, procedentes de diferentes ramas profesionales, como Sanidad, Educación Social, Trabajo Social, de Derecho, Diseño, Pedagogía y Periodismo, entre otras, "lo que favorece un enriquecimiento en la atención de las personas".

    Igualmente, cuentan con la ayuda de religiosas Hijas de la Caridad, sacerdotes de diferentes congregaciones y voluntarias de la Asociación Internacional de la Caridad (AIC), que cada fin de semana ofrecen el servicio de lavandería. Entre las funciones desempeñadas por los voluntarios se encuentra, no sólo la atención directa, si no también la limpieza, la sensibilización en colegios, o la recaudación fondos económicos y productos de primera necesidad", según las mismas fuentes.

    Servicios ofrecidos

    Además de la acogida, las personas que acuden al proyecto reciben información y orientación sobre la red de recursos para personas sin hogar y, si así lo desean, se les facilita el contacto con las distintas entidades que la componen.

    También se pone a su disposición un servicio de consigna, para dejar sus pertenencias hasta que finalice el fin de semana, así como el servicio de lavandería. Durante su estancia, los usuarios también tienen acceso a actividades de ocio como juegos de mesa, biblioteca, pintura o visionado de películas. Igualmente, existe un servicio de botiquín para atender pequeñas curas.

    Por otro lado, la actividad de talleres se ha consolidado como una herramienta de extrema utilidad para conocer y compartir con las personas que acuden al proyecto Rehoboth.

    Personas atendidas

    Durante el año 2017 el centro registró una media de entre 700 y 800 atenciones al mes, siendo el más elevado durante el mes de abril, con 875 personas atendidas.

    Respecto a la procedencia de las personas que acudieron al proyecto, un 40% son españoles y u 60% extranjeros, siendo las nacionalidades más destacas, después de España, Rumania, Marruecos y Argelia.

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