El Congreso Chapí plantea la necesidad de devolverle el lugar que merece en los escenarios
Las sesiones se han celebrado entre los días 18 y 21 en la Universitat de València
Numerosos participantes en las reuniones aportan noticias sobre obras suyas de gran calidad que han caído en el olvido
A partir de estos trabajos, los musicólogos y los programadores podrán hacer justicia a la magnitud de la producción de este genial músico
“Chapí se ha revelado como uno de los grandes de la historia de la música española y una figura central del teatro lírico europeo que trabajó magistralmente todos los aspectos relacionados con ella: la instrumentación, el tratamiento del texto y la vertiente dramática sobre todo”, según ha manifestado hoy Víctor Sánchez, uno de los directores del congreso.
Las jornadas celebradas en Valencia, que han reunido a los más destacados expertos españoles e internacionales, han servido para activar la investigación en diversas disciplinas como la literatura, la historia y la presencia del compositor en América, de modo que el resultado del congreso se plasmará en un libro que irá más allá de las actas y que incorporará los frutos de las investigaciones en curso abiertas a raíz de esta cita sobre Chapí, además de aportar interesantes datos sobre la música en general de aquella época.
Entre las novedades que ha arrojado el congreso, además de noticias sobre numerosas obras suyas prácticamente desconocidas en la actualidad, se encuentran su relación con Galdós, ya que Chapí escribió una zarzuela basada en los episodios nacionales, pese a que fueron otros dos libretistas los autores del texto, y el interés que el de Villena despertó en Falla.
Obra desconocida para el público
Aunque Chapí es universalmente conocido, sólo unos pocos títulos suyos, como La revoltosa, El rey que rabió o La bruja, entre otros, han tenido la difusión que merecían, una situación especialmente sangrante en los auditorios españoles en opinión de los expertos, que recuerdan que composiciones como Curro Vargas o Margarita la tornera no se han llevado a la escena en los últimos cuarenta años.
Pero además de por estas composiciones, el autor de Villena se significó en su día por la calidad que dejó en unas treinta obras líricas de primera magnitud que cosecharon grandes éxitos como La chavala, una zarzuela que está a punto de publicar el Instituto Complutense de Ciencias Musicales —como ha anunciado en el congreso el director de esta institución, Emilio Casares—- o la ópera Circe.
Esta circunstancia se ha producido también con respecto a la producción orquestal y de cámara de Chapí, que tampoco está presente como debiera en los auditorios españoles, pese a que su calidad es comparable con la de Massenet o Gounod, por poner algunos ejemplos.
El Congreso ha puesto de relieve el progresismo de Chapí y su sensibilidad y compromiso con respecto a la sociedad de su tiempo, pero también su pragmatismo, que se plasmaron por ejemplo en la creación de la Sociedad General de Autores como organismo concebido para la defensa de los derechos de los creadores.
Una profunda huella en Hispanoamérica
La presencia de Chapí en Hispanoamérica en su tiempo llegó mucho más lejos de lo que se creía hasta el momento. Diversas especialistas de esa parte del mundo han expuesto en el congreso novedades sobre estrenos y representaciones, pero también sobre la influencia que el maestro alicantino ejerció sobre la música de países como México, Cuba, Uruguay y Argentina. Además, y aunque este aspecto está pendiente de investigación, se sabe que la música del compositor dejó una huella muy importante en Perú y Colombia.
Ruperto Chapí (Villena, 1851-Madrid, 1909) fue uno de los músicos más destacados de la España de la Restauración. Nacido en Villena (Alicante) y de origen humilde, se formó en el Conservatorio de Madrid y completó sus estudios en Roma y París.
Tras su regreso a Madrid, comenzó una brillante carrera que le convirtió en un referente de los teatros musicales de todo el ámbito hispano, con obras de gran éxito como La revoltosa, La bruja o Margarita la tornera, dentro de un catálogo de más de doscientos títulos.
Su interés por el teatro musical le llevó a cultivar con fortuna todos los géneros de su época: ópera, zarzuela grande y género chico u opereta. Merece también especial mención su interesante aportación a la música para banda, sinfónica y camerística.
El congreso organizado por el Institut Valencià de la Música, la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) y el Instituto Complutense de Ciencias Musicales (ICCMU), con la colaboración de la Universitat de València y la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (SECC), supone el colofón de los actos conmemorativos llevados a cabo durante 2009 con motivo del centenario del fallecimiento del músico villenense.
