La Hockey World League arranca el 10 de junio en el Polideportivo de Beteró
El evento dará paso al Mundial y a los Juegos Olímpicos de Río 2016
Arranca la Hockey World League en Valencia. Desde esta semana, empieza en el Polideportivo Virgen del Carmen – Beteró una competición por eliminatorias que da la posibilidad a los países participantes de acceder tanto al Mundial como a los Juegos Olímpicos de Río 2016. Un acontecimiento de relevancia mundial en tanto en cuanto reúne a las mejores selecciones un año antes de los JJOO.
Las Semi-Finals consisten en dos eventos (en Valencia y Bélgica) de 10 equipos cada uno, con los tres primeros de cada campeonato obteniendo una plaza directa para participar en Rio 2016. Además, los equipos que finalicen el torneo entre las plazas 4 y 6 dispondrán de la segunda oportunidad anteriormente mencionada.
La Selección Española de Hockey Femenina que dirige Adrian Lock ya ha realizado varios stage previos en nuestra ciudad y ahora afronta la fase decisive de la competición. Dos grupos de cinco equipos que lucharán por accede a cuartos de final, semifinales, partido de clasificación y encuentros por las medallas.
En el Cuadro A se medirán Argentina, China, Gran Bretaña, España y Canadá, mientras USA, Alemania, Sudáfrica, Irlanda and Uruguay competirán en el Cuadro B.
La fase de clasificación será del día 10 al 16 de junio. Los cuatro mejores equipos de cada grupo accederán a los cuartos de final, iniciando la fase de eliminatorias.
Innovación en Beteró e impacto económico en la ciudad
La pista azul de Beteró, que ya fue pionera en la adaptación al color que después sería utilizada en los JJOO de Londres 2012, ha sido renovado en los últimos meses para ofrecer una mejor respuesta de juego con materiales más novedosos.
Y todo en un evento que las previsiones hablan de un tránsito de 35.000 personas durante los 11 días de la disputa de la World League, lo que sumando pernoctaciones, venta de entradas, consumiciones de hostelería y compras diversas arrojaría en base al estudio realizado por la Universidad de Valencia en 2013 un impacto esperado superior a los 320.000 euros.
