El Valencia se hace fuerte a base de goles (3-1) ante el Espanyol

Domngo playero, 34 grados en Valencia, partido a las cinco de la tarde (un horario que históricamente no agrada en Valencia)… y Mestalla lleno. No era para menos. La ilusión que ha generado este equipo en la presente campaña entre la afición es enorme. Ya lo demostró en el primer encuentro de la campaña ante el Málaga y lo volvió a demostrar en la siguiente ocasión, dos seguidas, por cierto, ante un español que, si bien no es un equipo de esos que agrandan el cartel, siempre que llega a Mestalla hace atractivo el choque.

A pesar de ser la hora de la siesta los jugadores del Valencia no se quedaron dormidos. Cierto es que en los primeros compases, como sucediera también frente al Málaga, el Espanyol tuvo la oportunidad de adelantarse en el marcador, pero pronto se vio que el Valencia quería responder a la fidelidad de los suyos con una alegría que aumentara todavía más la ilusión mostrada. El equipo de Nuno sólo necesitó siete minutos para que Rodrigo, que volvía a la titularidad, hiciera magia y dejara un balón en el área pequeña para que Piatti rematara al fondo de la red sin oposición.

El Valencia tomaba de esta forma el mando del encuentro después de la salida fulgurante de los pericos. Entre Parejo y André Gomes dominaban la lía medular y Alcacer y Rodrigo mareaban constantemente a la defensa españolista, que tuvo que dejar en manos de su guardameta Kiko Casilla la responsabilidad de que el marcador no fuera más escandaloso incluso antes de llegar al descanso.

Sergio González no se dio por vencido a pesar de la desventaja de su equipo en el marcador. Cambió el sistema para atacar de forma diferente a la defensa valencianista, que se había mostrado muy sólida en 40 de los 45 minutos que se llevaban disputados y la jugada no le salió mal. El Espanyol, como el inicio del encuentro, llegó con cierta facilidad a la portería de diego Alves, que tuvo que emplearse a fondo en un par de ocasiones para no tener que recoger el balón de su red. Incluso Sergio García envió un balón al fondo de la portería, aunque Clos Gómez consideró que lo hizo desde una posición ilegal y no dejó que el tanto subiera al marcador.

Fue el aviso que necesitaba el Valencia para volver a un encuentro del que parecía que se había olvidado después del descanso. Parejo volvió a coger la manija del encuentro y fue el propio capitán valencianista quien aprovechó un rechace en el centro del campo para encarar la portería de Casilla y colocar el balón justo donde el meta no podía llegar a impedir que el 2-0 subiera al marcador.

Fue casi la puntilla para el Espanyol que vio cómo todo el esfuerzo realizado en los minutos iniciales de la segunda parte para empatar se habían esfumado, mientras que el Valencia había resurgido y se lanzaba en oleadas sobre la meta rival.

La puntilla llegó de las botas de Alcacer que, con un desmarque impresionante, evitó la salida de Casilla y cerró el ciclo de goleadores del Valencia, que repitió los mismos anotadores que frente al Málaga. Poco después, Álvaro, que no había destacado por su buen juego defensivo, quiso ser protagonista con una entrada sobre Piatti que mereció la expulsión.

Un error más de Clos Gómez que, para cerrar su actuación, se inventó un penalti contra el Valencia en el tiempo de descuento con el que Sergio García maquilló un poco el marcador.

Ficha técnica

3 - Valencia: Alves; Barragán, Vezo, Otamendi, Gayà; Javi Fuego, Parejo, André Gomes; Piatti (Carles Gil 82’), Rodrigo (Feghouli 66’), Alcácer (Robert 87’)

1 - Espanyol: Casilla; J.López, Álvaro, Colotto, Arbilla; Abraham (Lucas Vázquez 45’) , V.Sánchez (Cañas 69’), Stuani (Caicedo 65’), S. Sevilla, Montañés; S.García

Goles: 1-0. Piatti (7’), 2-0. Parejo (63’), 3-0. Alcácer (72’) y 3-1. Sergio García (91')

Árbitro: Clos Gómez. Amonestó a Álvaro (79’) y Barragán (81’)