Albert: “Una vez más el PP castiga el buen trabajo municipal y beneficia a la iniciativa privada”

La concejala Rosa Albert ha valorado de forma negativa los pliegos de condiciones de las contratas, por un lado, de gestión, conservación, mantenimiento y limpieza de los espacios ajardinados y de sus instalaciones y de sus equipamientos, así como del arbolado urbano de la ciudad, y, por otro, la de mantenimiento y conservación de las fuentes ornamentales, procedimientos que han sido aprobados hoy en la Junta de Gobierno Local. Según ha asegurado la edil, “las dos van a tener efectos negativos sobre las plantillas de las tres contratas que en la actualidad prestan estos servicios, y que son FCC, SAV e Imesapi, ya que las modificaciones introducidas en los pliegos de ambas van a suponer en la práctica un empeoramiento de la calidad y la prestación de los mismos”.

En primer lugar, Albert se ha referido a los pliegos de condiciones de la contrata de mantenimiento y conservación de las fuentes ornamentales, que se saca a licitación con una duración de cuatros años con dos prórrogas anuales, por una cantidad de 2 millones de euros, lo que supone un presupuesto de 500.000 euros anuales. “Lo más destacado es que se produce una importante disminución del número de fuentes a mantener que pasan de 119 a 76, elementos que cabe recordar pasarán a ser mantenidos por la contrata de parques y jardines”, ha asegurado la concejala de la formación de izquierdas, quien, además, ha mostrado su preocupación por el hecho de que un pliego que lleva tantos años esperando su publicación no haya incluido cláusula de subrogación, “lo que implica que las trabajadoras y trabajadores se encuentran en una situación de absoluta desprotección y, por ello, vamos a presentar alegaciones en las que pediremos que se incluya”.

Otro punto que ha llamado la atención a la edil ha sido que de los 100 puntos, más de la mitad, en concreto 51, corresponden a la mayor baja económica, 28 puntos a la planificación anual de los trabajos y 21 a los medios humanos y materiales. Es decir, “es una barbaridad que más de la mitad de los puntos de valoración de una contrata sea la baja económica. Es inadmisible, desproporcionado e intolerable que una administración pública actúe de esta manera”, ha asegurado.

Contrata de parques y jardines

Respecto a la contrata de gestión, conservación, mantenimiento y limpieza de los espacios ajardinados y de sus instalaciones y de sus equipamientos, así como del arbolado urbano de la ciudad, la concejala ha comentado que sale con una duración de cuatro años con una prórroga de uno más y con una dotación económica anual de 12.391.999 euros, correspondiendo 6.910.460 a la zona norte y 5.481.539 a la zona sur, que es el presupuesto con el que ya viene trabajando en los últimos años.

Este nuevo pliego introduce la novedad de que, además de las funciones de limpieza y mantenimiento del arbolado de los parques y jardines, va a encargarse también de la limpieza y el mantenimiento de algunas fuentes ornamentales, con lo cual, y aunque se incluya la cláusula de subrogación de los trabajadores y trabajadoras, “no queda claro quién se va a encargar del mantenimiento de estos elementos teniendo en cuenta que las prestaciones de servicios que se tienen que desarrollar requieren de personal cualificado”, ha dicho.

Por lo tanto, desde Esquerra Unida “anunciamos ya que vamos a presentar alegaciones a este pliego para que se subrogue a la parte proporcional de la plantilla de la contrata de fuentes ornamentales para que puedan desarrollar los mismos servicios que vienen haciendo”, ha asegurado la concejala de la formación de izquierdas.

Aumento de parques a mantener

La otra cuestión también novedosa que ha destacado la edil es que muchos parques y espacios ajardinados que los que hasta ahora se encargaba el Organismo Autónomo Municipal de Parques Singulares van a pasar a ser gestionados por las contratas. En concreto, en la zona norte, el Palacio de Congresos, el Jardín de Polifilo, el Parque de Marxalenes, el Parque de Benicalap, el Parque de Orriols, el Paseo Marítimo de Neptuno y el Jardín de Beniferri.

Por contra, “entendemos que el Parque de Viveros, hasta ahora gestionado por la contrata de Parques y Jardines, pasará a ser mantenido por el Organismo Autónomo Municipal de Parques Singulares”, ha añadido. Por lo que respecta a la zona sur, pasarán a la contrata la Gran Vía Marqués del Turia, la Gran Vía Fernando el Católico, la de Ramón y Cajal, el Jardín de las Hespérides y el Parque Oeste.

En definitiva, “los parques y jardines más importantes de la ciudad que después del esfuerzo inversor y de la buena labor desarrollados durante estos años por parte de este organismo municipal, convirtiéndose en espacios que son referencia del trabajo bien hecho y del buen mantenimiento de los mismos, vamos a darlos a manos privadas que no cuentan con el grado de especialización que sí que tiene el Organismo Autónomo, y ejemplo claro de esto es el estado en el que se encuentra el Parque de Viveros”, ha manifestado la edil, quien ha añadido que, una vez más, “el equipo de gobierno del PP castiga el buen trabajo y beneficia a la iniciativa privada”.

Presupuesto insuficiente

Por otro lado, Rosa Albert también ha calificado como “preocupante” que el pliego salga con el mismo presupuesto que hay hasta ahora, sobre todo, “si tenemos en cuenta que dentro de las cláusulas del pliego se oferta como mejora la baja económica, que se valora en 19 puntos”.

“Si a esto le unimos los 10 puntos que se aplican a la baja de los precios unitarios, es más que previsible que el nuevo contrato se adjudique por un precio sensiblemente inferior al inicial”, ha indicado la concejala, quien ha considerado que la consecuencia directa recaerá sobre el capítulo de personal, “ya que hace inviable el mantenimiento de la plantilla actual si se siguen manteniendo estas condiciones”.

Por el contrario, se garantiza un beneficio industrial que podrá alcanzar hasta el 8 por ciento del coste directo. Es decir, “que mientras introducimos cláusulas o aprobamos presupuestos que suponen siempre recortes para las condiciones laborales de los trabajadores y trabajadoras, no se hace lo mismo con el beneficio que se les da a las empresas”. “Hay que recordar –ha matizado Rosa Albert- que menos personal significa menor mantenimiento y peor calidad y perjuicio para los ciudadanos y ciudadanos y degradación de los servicio públicos”.