Compromís exige suspender el Plan Especial de la Marina
El proceso participativo se ha limitado a entrevistar a 34 personas y a la organización de tres mesas redondas
La modificación de uso de la parcela triangular al norte de la dársena supone un cambio del PGOU
El estudio de sostenibilidad económica estima unos beneficios de 2,5 millones de euros anuales, con los que el Consorcio tardaría 167 años para pagar la deuda de 398 millones de euros, sin contar los intereses
Compromís ha exigido al Ayuntamiento de Valencia, suspender la aprobación del Plan Especial de Marina. Desde Compromís han destacado que la participación ciudadana se ha limitado a la organización de tres mesas redondas temáticas y a entrevistar a 34 personas, lo que supone una muestra de sólo el 0,00425% de la población total de la ciudad. Del mismo modo han criticado que las respuestas a las alegaciones presentadas no han sido remitidas todavía a los diferentes individuos y colectivos que las habían presentado.
La modificación a uso terciario de la parcela triangular de 15.000 metros cuadrados al norte de la dársena, que según el PGOU es zona verde, tiene que contar necesariamente con el informe favorable del Consejo Jurídico Consultivo, lo que supone un claro incumplimiento de la LUV.
Finalmente el informe de sostenibilidad económica que ahora se adjunta al Plan Especial define 6,2 millones de euros de costes de urbanización, unos ingresos de 6,13 millones de euros anuales en el momento que estén todos los espacios ocupados y unos gastos anuales de mantenimiento de 3,75 millones de euros. Lo que supondría unos beneficios anuales de 2,38 millones de euros, con estos beneficios el Consorcio Valencia 2007 tardaría más de 167 años en pagar la deuda de 398 millones de euros, sin contar el pago de los intereses y la amortización de los costes de urbanización.
Joan Ribó, portavoz de Compromís ha declarado: “El principal proceso urbanístico de la ciudad de Valencia no se puede aprobar con prisas y con visión electoralista. Las 34 personas encuestadas y las tres mesas redondas no pueden justificar la participación en un proyecto de esta envergadura. Además las cifras del informe económico confirman que sin condonar el lastre de la deuda de 398 millones de euros no se podrá hacer realidad este Plan Especial”.
