El MuVIM rinde homenaje a las mujeres y a la resistencia de El Cabanyal
«Con la traducción al castellano se suele perder ese matiz» âasegura el director del MuVIM, Rafael Companyâ «pero decir en El Cabanyal que una mujer es 'valenta' implica una connotación admirativa. Un modelo a seguir». La obra de Maribel Domènech âartista, doctora en Belles Arts i catedrà tica d'escultura de la Universitat Politècnica de Valènciaâ que ocupará el vitral del museo hasta el mes de noviembre, lleva por tÃtulo precisamente «Dones valentes». En ella aparecen tres mujeres, las hermanas MartÃ, protagonizando una cacerolada a la puerta de su casa de El Cabanyal. Una casa sobre la que pendÃa la amenaza de la desaparición por el plan del anterior equipo de gobierno municipal que pretendÃa la prolongación de la avenida de Blasco Ibáñez hasta el mar.
El valor de la gente mayor
«Cuando se habla de movimientos sociales» âapunta Maribel Doménechâ «de salir a la calle para protestar o reivindicar algo, se suele pensar que se trata de acciones protagonizadas por gente joven y mayoritariamente masculina. Pero la realidad es que el grueso de esas reivindicaciones lo conforman mujeres y, en un número significativo, mujeres mayores. En mi obra yo he querido rendir homenaje a esas mujeres mayores que no han perdido el espÃritu de lucha y rebeldÃa». Y, como ejemplo paradigmático, la artista mencionó las actuales movilizaciones contra la pérdida de valor adquisitivo de las pensiones. «Vivimos en una sociedad que ensalza la juventud permanente. Parece âasegura Domènechâ que con la edad las personas pierden valor, en el doble sentido de la palabra: que dejan de valer y que pierden el coraje. Cuando es exactamente todo lo contrario: como estamos viendo estos dÃas, nuestros mayores son cualquier cosa menos personas pusilánimes. Han demostrado un Ãmpetu y arrojo admirables. Y que mantiene intacta la capacidad de indignarse contra las injusticias sociales, como la pérdida de valor adquisitivo de las pensiones que se han ganado con mucho esfuerzo a lo largo de su vida».
Lo personal es polÃtico
La obra de Maribel Doménech que se podrá contemplar en el hall del museo desde el 7 de marzo está protagonizada por esas tres mujeres mayores vestidas de negro, de pelo blanco y rostros sonrientes, tocando la cacerola a la puerta de su casa contra la amenaza de derribo de su casa, construida por sus padres en 1908. En las manos llevan objetos cotidianos âmazas, cacerolas, martillosâ que en aquellos dÃas «se convirtieron en instrumentos de resistencia», apostilla Maribel Domènech. Por eso mismo aparecen destacados en rojo en el vitral. Para la artista, las hermanas Martà representan a todos y todas las vecinas: su actitud, su fuerza y dignidad visibilizan el poder de la resistencia y del movimiento vecinal. Una resistencia que no fue baldÃa: «la casa se mantiene en pie y allà sigue viviendo la única de las hermanas que sigue viva, Pepa».
Porque no se trataba tan sólo de un edificio, era mucho más: era un lugar de la memoria que atesoraba los recuerdos de varias generaciones de una misma familia. Precisamente, el trabajo artÃstico de Domènech ha buscado siempre reflexionar sobre «lo Ãntimo y social de la vida cotidiana». No en balde la artista hace suyo el adagio de la feminista Carol Hanisch, quien en un ensayo publicado en 1970 aseguró que «lo personal es polÃtico». Para Maribel Domènech «nuestra acción polÃtica como mujeres se configura en las decisiones que tomamos, dentro de la rutina, todos los dÃas. La acción de las hermanas MartÃ, saliendo a la puerta de su casa para defenderla, era un ejemplo inmejorable de eso».
La muestra del Vitral del MuVIM, comisariada por Elena Plaza, se complementa con «Reina 135» âen alusión a la calle de El Cabanyal y el número de la viviendaâ un vÃdeo de 2001 de Pedro Ortuño en el que aparecen dos de las hermanas Martà âLola y Antoniaâ relatando ante las cámaras las vivencias transcurridas en la casa que el plan urbanÃstica pretendÃa derribar. Un documental «de gran valor etnográfico», ha resaltado la artista. Otro vÃdeo, titulado «Acción continua», repasa a su vez la trayectoria artÃstica de Maribel Doménech.
Homenaje a la galerista RosalÃa Sender
Dentro de las actividades de su «Setmana de la Dona», el MuVIM también rendirá hoy un homenaje a la galerista RosalÃa Sender, mujer trabajadora y polÃticamente comprometida que ha dirigido durante décadas una galerÃa de arte contemporáneo con su nombre en la ciudad de Valencia. La galerista ha donado al museo un total de 161 obras de su colección particular, en la que se incluyen serigrafÃas, litografÃas y obras de artistas valencianos como Genovés, Renau, Equipo Crónica, Carmen Calvo o Rosa Torres, además de obras de Saura y Tà pies, entre otros.
La mayorÃa de la donación está compuesta por obra gráfica âen muchos casos dedicada personalmente a RosalÃa Senderâ realizada en las décadas de 1970, 1980 y 1990 por artistas valencianos. Se trata âen palabras de Amador Griñó, jefe de exposiciones del museoâ de un «legado sentimental que ofrece una panorámica inmejorable del arte que se produjo en este paÃs sobre todo durante la Transición a la democracia».
La vida de RosalÃa Sender es, según Griñó, «todo un ejemplo de compromiso cÃvico. Tuvo que vivir un penoso exilio después de la guerra civil y, a su vuelta, se implicó personalmente en la resistencia antifranquista, militando primero en la Juventud Socialista Unificada (JSU) y después, hasta 1986, en el PCE. Ambas facetas, la polÃtica y la artÃstica, lejos de contradecirse se complementaban: en su galerÃa expuso obras de artistas que habÃan sido compañeros de clandestinidad.