El Levante UD sufre un curso intensivo de pegada en ataque del Real Madrid

El Real Madrid obtuvo una plácida victoria en el Ciutat de València espantando así los fantasmas que en los últimos años acompañaban al conjunto blanco en su visita a los granotas. Y es que si en las últimas temporadas el equipo de la capital había tenido que sudar de lo lindo para poder ganar al Levante, ayer acabó endosándole una manita sin tener que jugar a su mejor nivel y demostrando una potencia en ataque que está fuera de lo normal.

Y eso que los valencianos plantaron batalla en la primera parte, donde gozaron de buenas ocasiones para poder perforar la portería de un Casillas que acabó el partido sin tener que intervenir. La falta de remate granota y Modric, que sacó un balón de la misma línea de gol tras saque de córner en lo que hubiera supuesto el empate a uno, hicieron que ayer el debate en la portería blanca no estuviera presente tras muchas semanas.

El Levante planteó un partido abierto, tocando el balón y jugando de manera valiente a un Madrid que avisó desde el primer minuto de sus intenciones de aprovechar cualquier hueco que hubiera en la defensa granota. Así acumuló sus primeras ocasiones erradas ante Mariño, hasta que una internada en el minuto 12 de Chicharito fue interceptada por Juanfran en lo que supuso el penalty que permitiría abrir el marcador para los visitantes. Ronaldo fue el encargado de lanzarlo y Mariño adivinó perfectamente por dónde iba el balón pero no pudo atajarlo.

La jugada supuso además la tarjeta amarilla para el capitán levantinista. La actitud del colegiado respecto a la señalización de faltas y amonestaciones supondría a la postre una de las mayores rémoras para los valencianos. En un partido de guante blanco es casi bochornoso que el colegiado acabase sacando hasta 4 tarjetas amarillas a los valencianos en la primera parte con lo que esto condiciona.

Modric salva el empate

No perdió la cabeza el Levante tras encajar este primer gol, y siguió bien posicionado y buscando la puerta de los madrileños, aunque con más voluntad que acierto. Fue en un saque de esquina cuando el Levante vio truncado el gol del empate porque Modric fue capaz de sacar el remate de Camarasa sobre la misma línea de gol. Quizá el empate hubiera sido una justa recompensa al trabajo de los valencianos, pero lejos de ello acabaron encajando el 0-2 tras un remate de cabeza de Chicharito tras centro de James. Era el minuto 38 y con este marcador se llegó al descanso.

Y como dice el dicho que segundas partes nunca fueron buenas, los levantinistas decidieron hacer buena esta frase. Es casi incomprensible la manera en la que el juego granota fue desvaneciéndose conforme pasaban los minutos del segundo acto, y quizá más que la falta de juego fue la sensación de bajar los brazos y la intensidad lo que más defraudó a los aficionados azulgranas. Acostumbrados en las últimas temporadas al pundonor mostrado por los valencianos en este choque, ayer ese espíritu acabó brillando por su ausencia.

Además, el cambio de Gavilán por Víctor Pérez al inicio de la segunda parte pareció desmoronar el sistema de juego de los granotas. Lejos de reforzar al equipo el cambio no le sentó nada bien. Y al Madrid le sobraba ya a estas alturas con tocar el balón, triangular en el centro del campo y buscar los huecos de una defensa azulgrana que cada vez daba mayores facilidades. Por parte local era Morales el que más intentaba subir su banda pero sin finalización de jugada, y a la postre sería uno de los pocos jugadores destacados por parte de los valencianos.

Y como el que no quiere la cosa, Rubén perdió un balón cerca del área madridista y en la contra el Madrid amplió el marcador con un nuevo gol de Ronaldo. Minuto 61 y el 0-3 hundía definitivamente a los valencianos. Pero hay maneras y maneras de perder, y ayer se podía haber encajado un 0-7 ó 0-8 fácilmente si no llega a ser por alguna buena intervención de Mariño y algún fallo de remate de los jugadores blancos. La bajada de brazos de los granotas es más que criticable.

Una bonita jugada significó el cuarto gol blanco por mediación de James en el minuto 66. A estas alturas del partido los de casa sólo deseaban que pasasen cuanto antes los minutos restantes, y la fiesta se daba en la grada visitante. Fiesta que culminó Isco al certificar la manita en el minuto 82. El Real Madrid confirmaba así su excelente pegada de cara a puerta y el Levante firmaba su cuarta derrota consecutiva esta temporada en casa, donde además no ha sido capaz de hacer cantar ni un solo gol a su hinchada.

Pintan bastos por Orriols como en los dos próximos encuentros, frente al Celta en Balaídos y en el Ciutat de València contra el Almería el equipo no saque un mínimo de cuatro puntos para no empezar a despegarse del grupo de equipos que se encuentran fuera de los puestos de descenso. La excusa de enfrentarse a los grandes se agota y este Levante debe empezar a sacar casta y juego para sumar puntos lo antes posible.

Ficha Técnica

Levante UD: Mariño, Iván López, Pedro López, Héctor Rodas, Juanfran, Pape Diop, Camarasa, Rubén, Gavilán, Morales y Casadesús.

Real Madrid: Casillas, Carvajal, Pepe, Nacho, Marcelo, James, Isco, Modric, Kroos, Chicharito y Ronaldo.

Cambios: Víctor Pérez (45', Gavilán), Barral (66', Casadesús), Illarramendi (67', Kroos), Arbeloa (72', Marcelo), Xumetra (74', Rubén García), Medrán (78', Modric)

Arbitro: Ignacio Iglesias Villanueva
Amonestaciones: Juanfran (min 11), Camarasa (min 23), Gavilán (min 27) y Pedro López (min 44) (Amarilla)

Se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de Vicente Lluch, presidente de la Comisión Gestora de la entidad azulgrana en los primeros años ochenta.