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Giner celebra la Capital Verde Europea y defiende su propio modelo sostenible: menos multas y más inversión

  • Considera que el camino hacia el objetivo 2030 es la inversión en proyectos que transformen la ciudad y la formación a los ciudadanos

El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valencia, Fernando Giner, ha celebrado el nombramiento de Capital Verde Europea en su vuelta a Valencia, después de haber estado en Grenoble junto con el equipo de gobierno para apoyar la candidatura. “Fuimos a la entrega del reconocimiento como Capital Verde Europea porque hemos apoyado la iniciativa desde el principio. Nosotros siempre hemos estado de acuerdo con esta iniciativa, y la hemos impulsado desde el minuto uno”, ha indicado.

“Es un tema de Estado municipal. Y nosotros, siempre que hay un tema de Estado municipal, que beneficia a todos los valencianos y valencianas, estamos ahí presentes”, ha continuado al respecto. “Y es que estamos totalmente de acuerdo: no hay otro camino que no sea la sostenibilidad. La Valencia 2030 a la que aspiramos todos. Y este reconocimiento supondrá inversiones, formación, actividades, talleres… Un camino que entendemos que es bueno”, ha indicado.

Aun así, Giner ha señalado que el apoyo no es un “cheque en blanco”, y que la formación liberal también tiene sus propias aspiraciones, propuestas y visiones sobre el camino hacia la agenda 2030. “Nosotros defendemos todo lo que he dicho antes: la formación y las inversiones para reconvertir Valencia en una ciudad más sostenible. No creemos, por ejemplo, en las multas que ahora tan de moda ha puesto el gobierno de Ribó, entre la ORA y las cámaras de Ciutat Vella, por ejemplo”, ha detallado.

“También pensamos que la Capital Verde Europea no debe quedarse solo en la ciudad, sino que tiene que llegar hasta nuestras playas. Unas playas que necesitan atención e inversión urgente para su regeneración”, ha explicado. Y, en este mismo sentido, también ha defendido que el Sidi Saler se convierta en una residencia de mayores, en lugar de derribarlo, lo que a la postre podría traer más problemas ambientales. “Lo que no queremos en la playa es una escombrera. Ahora que ya está hecho, lo normal es que se le busque otro uso”, ha finalizado.

“Tengo un modelo de ciudad diferente al que tiene Ribó, eso es cierto, pero sé cuándo dejar las diferencias a parte para beneficiar a toda Valencia. Este reconocimiento es muy importante para nosotros, y esperemos que 2024 sirva como punto de partida para la transformación de la ciudad”, ha indicado.  

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