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La Alquería de Julià se convertirá en la “Casa de la Música” y sede de la Federación de Sociedades Musicales

    El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el alcalde de Valencia, Joan Ribó, han presentado hoy en el Palau de la Generalitat el proyecto de rehabilitación de la Alquería de Julià para convertirla en un centro musical y sede de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana. Al acto ha asistido también José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, entidad propietaria del edificio y que invertirá cerca de dos millones de euros en las obras. La alquería contará con un auditorio, biblioteca, archivos sonoros y de vídeo, una sala de partituras y diferentes espacios para uso cultural.

    En el acto, el alcalde Joan Ribó se ha felicitado por el comienzo de una rehabilitación “que permitirá a la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana iniciar una nueva andadura en unas instalaciones mejores y además acaba con el deterioro que afectaba a un edificio del siglo XVII cargado de historia”. Para el alcalde de Valencia, uno de los elementos más atractivos de este proyecto es “la conjunción de la huerta y la música. En el mismo lugar donde hace tantos años habitó una comunidad rural dedicada a trabajar la huerta, ahora habrá música“.

    El alcalde de Valencia se ha mostrado satisfecho por el acuerdo logrado con la entidad propietaria de la alquería: “Esta solución es fruto de la negociación y la voluntad de entendimiento, con el objetivo de elaborar un futuro mejor para este antiguo complejo agropecuario. No podemos ni queremos volver atrás, a unos tiempos en los que la política urbanística amenazaba alquerías como la de Julià, que se convertían rápidamente en bienes codiciados sobre los que poder edificar”.

    Ribó ha finalizado su intervención señalando que la alquería sobrevivirá en medio de la trama urbana de nuestra ciudad “recordándonos cómo ha crecido Valencia en los últimos años, en gran medida a costa de una huerta tan mítica como productiva y repetidamente sacrificada en el proceso de expansión de la ciudad. Se cierra un capítulo de degradación y se abre otro de colaboración, para que la Alquería de Julià se convierta en un punto de referencia en la educación y la cultura musical de nuestra tierra”.

    L’ALQUERIA DE JULIÀ

    La Alquería de Julià puede considerarse uno de los escasos ejemplares conservados de alquería valenciana del siglo XVII y contiene elementos estéticos de gran valor. El edificio fue declarado Monumento Artístico Nacional en 1978 y Bien de Interés Cultural en 2007, la figura de más alta protección en la ciudad de Valencia.

    La propiedad está constituida por una parcela de casi dos mil metros cuadrados, con una construcción de 692 metros cuadrados distribuidos en dos alturas y un torreón de 51 metros cuadrados adicionales. El resto lo ocupa un patio ajardinado en parte, con una antigua cancha de baloncesto utilizada por el colegio que albergó este edificio hasta principios de los años 90.

    Después de la restauración, la planta baja de la alquería albergará la zona administrativa y sede de la Federación de Sociedades Musicales, además de la biblioteca, los archivos y un aula multiusos de 40 metros cuadrados. En la primera planta se dispondrá de una sala de reuniones y un espacio multiusos y se abrirán al público las salas con las pinturas y bóvedas más relevantes.

    La rehabilitación se completará con la construcción de un auditorio de nueva planta bajo el jardín de la alquería, con accesos independientes a través de la planta baja y el propio jardín. El auditorio y la sala de ensayos tendrán una superficie de 200 metros cuadrados y contarán con las mejores condiciones acústicas.

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