La alcaldesa se despide del jefe del Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad
Rita Barberá ha recibido a Fernando Sánchez-Lafuente
Tras agradecer en su nombre y en el de todos los valencianos la labor que el militar ha prestado al frente del Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad, la Alcaldesa le ha deseado al Teniente General lo mejor.
Asimismo, tal como le manifestó hace cuatro años, en septiembre de 2007, cuando el militar asumió la Jefatura del la antigua Capitanía de Levante, la Primera Autoridad Municipal se ha puesto a disposición del militar “para todo aquello que sea necesario”, y ha recordado que el Consistorio “siempre coopera con todas las instituciones públicas al servicio de los ciudadanos”.
Durante esta reunión, de carácter protocolario, Rita Barberá y Fernando Sánchez-Lafuente Caudevilla han hablado de distintos temas de actualidad que interesan tanto a la sociedad civil como a la comunidad de militares, así como de las relaciones entre la ciudad y el Ejército.
El Teniente General Fernando Sánchez-Lafuente, natural de Zaragoza, ha evocado experiencias vividas con la Alcaldesa, con la que coincidió, por primera vez en el año 1999, cuando partía hacia Albania al mando de una fuerza militar que debía hacerse cargo de un campo de refugiados bajo pabellón internacional. En aquel momento, Rita Barberá acudió al Puerto a despedir al contingente en nombre de todos los valencianos.
Rita Barberá ha obsequiado al militar con un ejemplar del facsímil, editado por el Ayuntamiento de Valencia, del último manuscrito de Tomás Moro, patrón de los políticos, cuyo original se encuentra custodiado en la Iglesia de El Patriarca, del Real Colegio Seminario del Corpus Christi.
Este texto manuscrito, titulado “De Tristia Christi”, llegó a Valencia siendo Virey de la ciudad, Juan de Ribera, y fue escrito por el santo inglés en la prisión, cuando se encontraba a la espera de ser decapitado por oponerse a los caprichos de Enrique VIII y por no avalar la fundación de la Iglesia Anglicana que aquel pretendía ante la negativa del Vaticano a legalizar su divorcio con Catalina de Aragón.
