La población de Vilamarxant se interesa por conocer sus orígenes como pueblo

Entre el pasado viernes y hoy, lunes, más de 70 vecinos y vecinas de Vilamarxant han visitado las prospecciones arqueológicas que un equipo de la Universitat de València está llevando a cabo en la plaza del Castillo para determinar el origen del mismo y de la muralla que rodea la zona, a la vez que para esclarecer los inicios de la población de Vilamarxant.

Las visitas han estado dirigidas por los arqueólogos David Vizcaíno y Pau Armengol y por la profesora de Historia de la Universitat de València, Ester Alba.

El encuentro de estas citas ha tenido lugar en la plaza de la Iglesia, donde el grupo de investigadores ha explicado a las personas asistentes la posibilidad de que en este espacio hubiera una mezquita musulmana anterior al templo cristiano, un hecho del que hay documentación del siglo XIV.

Una vez en la plaza del Castillo, Ester Alba explicaba el viernes pasado a las personas asistentes las fases de la investigación que consisten en una primera parte centrada en los sondeos sobre el terreno; i otra parte que se enfoca en el trabajo bibliográfico y documental que está llevándose a cabo en el archivo municipal de Vilamarxant, el de Valencia, el de la Corona de Aragón y el de Toledo.

Después, se llevará a cabo una recreación en tres dimensiones de lo que era la muralla y la zona del Castillo y, de manera paralela, especialistas en época islámica determinarán las alquerías que conformaron los orígenes del municipio, basándose en el sistema de regadío y de acequias.

El trabajo está dando resultados muy positivos

Como explicaba Ester Alba, "de nuestra historia nos llegan fragmentos que nosotros tenemos que ir uniendo y reconstruyendo". Y esto es lo que está haciéndose en Vilamarxant a través de las prospecciones que están llevándose a cabo desde el mes de junio. Además, el equipo de la Universitat de València considera que el Castillo de Vilamarxant y lo que está encontrándose en sus alrededores son de los hallazgos islámicos mejor conservadas en toda la Comunidad Valenciana.

Por eso, ha sido necesario evaluar no solo lo que se ve, sino también el subsuelo de la plaza. Allí se han encontrado restos de la muralla islámica que había en el casco antiguo de Vilamarxant y que estaría datada entre los siglos XI y XIII. Además, el pasado viernes, el equipo investigador descubrió el espacio de una puerta islámica de acceso a la plaza, de la que tenían sus sospechas pero sin una evidencia física que ahora ya hay.

Así, han relatado a las personas asistentes que la muralla es de época almohade, es decir, de la última época musulmana: la más convulsa y de lucha, justo antes de la conquista cristiana. Dado el volumen y la profundidad de los estratos encontrados, se determina que nuestra localidad tuvo una fuerte presencia musulmana, cuando los llamados castillos eran empleados como elementos defensivos y para proteger a la población de los ataques y amenazas.

El equipo investigador también ha explicado que la morfología de las construcciones islámicas es muy diferente al actual. En aquella época no solía construirse sobre superficies planas, sino que se aprovechaban las rampas y desniveles como fundamentos propios de las construcciones y, a la vez, como elementos defensivos.

Estas hipótesis se han extraído de un primer sondeo positivo hecho en la zona. En un segundo sondeo abierto en el callejón sin salida se han encontrado también testimonios constructivos de la época musulmana. Allí habría un tipo de patio defensivo que tendría la muralla a pocos metros y que estaría conectado con otro patio parecido pero a un nivel inferior, cerca de la actual Biblioteca municipal. Estos patios de diferentes niveles y dentro de la zona amurallada también eran empleados como construcciones defensivas para tener al enemigo siempre visible.

En este segundo sondeo se han encontrado diferentes piezas cerámicas de varias épocas que, una vez extraídas, se clasifican y catalogan.

Se ha encontrado interesante cerámica almohade, de los siglos XII y XIII. Junto a estas piezas hay elementos de otros siglos, ya de época cristiana.

Tanto Ester Alba, como David Vizcaíno y Pau Armengol han mostrado a los vecinos y vecinas las diferencias en cuanto a textura y color de la cerámica de cada época.

El equipo investigador ha expresado en las dos jornadas de visitas su sorpresa por la gran cantidad de piezas y de elementos arquitectónicos en buen estado que han encontrado en Vilamarxant. Según Ester Alba, estamos hablando de un Bien de Interés Cultural (BIC), un monumento nacional que, en otras épocas, no recibió la protección necesaria. Con todo, según la historiadora, "tenemos que reconocer la tarea de los guardianes y guardianas de este Castillo. Esas personas que han habitado esta plaza desde hace décadas y que, sin su presencia, hubiera sido imposible su conservación". Por eso, insistía, "la colaboración vecinal es fundamental para que esta investigación sea exhaustiva y nos aporte los datos más fieles posibles".

El alcalde de Vilamarxant, Jesús Montesinos, también ha afirmado que "nuestro patrimonio es parte de nuestra historia y forma parte de aquello que nos identifica como pueblo. Descubrirlo y conservarlo nos ayudará a crecer como sociedad con unos fundamentos sólidos y a ser conscientes de la riqueza histórica y cultural de nuestro municipio; conocimientos con los que educaremos a las generaciones futuras".

Esta iniciativa de visitas abiertas ha estado organizada por la Concejalía de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Vilamarxant para hacer partícipe a toda la población de la propuesta de los Presupuestos Participativos elegida por los vecinos y vecinas en 2016. Además, el viernes también tuvo lugar una visita organizada por la Associació Cultural 9 d'Octubre.