Alberic insta una vez más a los propietarios a proteger el edificio centenario situado al lado del Ayuntamiento por el peligro de derrumbe
El Ayuntamiento de Alberic ha iniciado el expediente de ruina inminente para un edificio protegido y catalogado como histórico situado al lado de la Casa Consistorial, tras notificar una vez más a los propietarios su obligación de protegerlo, sin que en los últimos años haya fructificado acción alguna por su parte. Los técnicos del consistorio avisaron que será obligatoria su demolición si no es reformado por los propietarios para asegurar la estructura y evitar posibles daños para la ciudadanía ya que en los últimos meses se han producido varios desprendimientos que han podido causar una desgracia humana. Este fin de semana se desplomó parte de la cornisa, por lo que tuvieron que acudir los bomberos para actuar de urgencia y evitar males mayores. Desde hace dos años el ayuntamiento que comanda Toño Carratalá se ha puesto en contacto en varias ocasiones con los propietarios de la casa centenaria, que se va cayendo a trozos con cada inclemencia meteorológica. De hecho, la falta de respuesta de los dueños ha llegado al juzgado, por la imposibilidad de obtener respuesta a los requerimientos lanzados desde el ayuntamiento.
El consistorio se ha visto obligado, por la dejadez de la propiedad, a gastarse ya más de 70.000 euros en trabajos para garantizar la seguridad de la ciudadanía, tanto de los viandantes como de las casas colindantes, cuyos vecinos ven como los cascotes les caen peligrosamente en sus viviendas. Sin embargo, los propietarios no han reaccionado y no se ha producido intervención alguna para la restauración. Tras el último incidente, el consistorio ha iniciado el expediente de ruina inminente, por lo que se realizará un nuevo requerimiento a los propietarios y en caso de no responder se intervendrá en la estructura con su derrumbe tras previa autorización del departamento de patrimonio correspondiente. El edificio está catalogado, por lo que el ayuntamiento siempre ha trabajado para proteger la fachada y cubierta en las demoliciones anteriores. Sin embargo, es responsabilidad de los propietarios privados su mantenimiento, que no se ha realizado. La legislación establece que un edificio catalogado puede ser derruido para evitar mayores perjuicios, por ejemplo vinculado con la seguridad de los vecinos y vecinas.
La actuación forma parte de un proyecto estructural en la localidad. El ayuntamiento hace unas semanas ha iniciado también las inspecciones técnicas de los edificios de más de cincuenta años de la localidad para comprobar su estado y evitar posibles incidentes.
