Cultura promueve la rehabilitación del Castillo de Almizra
En 2013 se ha realizado el desescombro y consolidación de restos del trazado del Castillo de Almizra en la zona norte para mejorar su visitabilidad y puesta en valor
La directora general de Cultura, Marta Alonso, ha visitado las obras de consolidación y desescombro llevadas a cabo por la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte en el Castillo de Almizra de El Camp de Mirra, y ha presentado la nueva actuación prevista para este año, ambas actuaciones suman una inversión de más de 100.000€ por la Dirección General de Cultura.
Desde la Dirección General de Cultura estamos trabajando con el Ayuntamiento de El Camp de Mirra para mejorar la visitabilidad tanto del castillo como del municipio, para reforzar su atractivo turístico y cultural, ya que se trata de uno de los enclaves más importantes de la provincia de Alicante.
Se trata de un Bien de Interés Cultural cuya importancia se debe no sólo a la fortificación, sino también a que este lugar es de gran importancia histórica pues aquí se realizó la entrevista entre Jaume I y el infante Alfonso de Castilla que dió lugar al tratado de Almizra, que puso fin a la contienda fronteriza castellano-aragonesa al fijar definitivamente la frontera. Este hecho histórico ha dado lugar a que la directora general Marta Alonso haya anunciado que "se está ultimando el informe para iniciar la declaración como Bien de Interés Cultural del Sitio Histórico Puig de Almizra, que será el primer Sitio Histórico que se declare en la Comunitat Valenciana".
Con motivo de los estudios técnicos que se están llevando a cabo se ha constatado que en el municipio existe otra torre, y tras hacer unas mediciones y estudio de los acabados se ha deducido que se trata de una torre cristiana posterior al tratado. No obstante, al tratarse de una masía fortificada es también un Bien de Interés Cultural y se procederá a su inscripción en el Registro General de Bienes de Interés Cultural.
La intervención realizada en 2013 en el Castillo de Almizra ha consistido en el desescombro y consolidación de restos del trazado del castillo en la zona norte, más próxima al acceso al recinto, con el fin de permitir vislumbrar la delimitación del perímetro oculto del recinto. Para ello se ha realizado el desescombro manual de la zona que ha contado en todo momento con seguimiento arqueológico, lo que ha permitido sacar a la luz parte del muro que posteriormente se ha reconstruido con las piedras recuperadas en el desescombro, y finalmente se ha rematado con nuevas fábricas con la intención de mejorar la comprensión del edificio y acercarlo al visitante.
Con estas intervenciones desde la Dirección General de Cultura de la Conselleria de Educación Cultura y Deporte se pretende colaborar en la conservación del Patrimonio Cultural Valenciano, ayudando a los municipios a recuperar los edificios históricos que forman parte de su pasado con el fin de preservarlos y ponerlos en valor para que las generaciones venideras puedan seguir disfrutando y conociendo nuestro vasto pasado histórico y cultural.
El castillo de Almizra
El castillo se encuentra al sudoeste de la población sobre el cerro de San Bartolomé. Junto al castillo se encuentra una ermita consagrada a San Bartolomé adosada a una torre defensiva cristiana. El castillo domina todo el amplio valle del Vinalopó entre la sierra de Beneixama y la sierra de Onil.
El enclave en el que se encuentra evidencia una ocupación en época prehistórica, en la Edad de Bronce Antiguo/Medio, según se desprende del estudio de las cerámicas y de la industria ósea aparecidad durante las diferentes campañas arqueológicas y que tras una fase de abandono vuelve a estar ocupado a fines de la época islámica (siglos XII-XIII), convirtiéndose en una fortificación que parece perdurar, con ciertas transformaciones, hasta el siglo XVI.
Los trabajos arqueológicos han dejado al descubierto una parte considerable del castillo, destacan un aljibe en la zona Sur y unas estancias situadas al noreste del castillo que se han identificado como celdas-silos, se distinguen con claridad unas ocho celdas. Estas estancias tienen semajanza con otros castillos datados en la primera mitad del siglo XIII, y para los cuales se ha propuesto una funcionalidad de granero colectivo relacionada con la aljama o comunidad campesina local.
