La cruz procesional de Benifallim abandona temporalmente la exposición ‘Camins d’Art’ por las fiestas patronales
Se trata de una cruz datada en 1580 y realizada en plata blanca y dorada. A falta de documentos que lo atestiguen, pudo tratarse de un regalo realizado por el arzobispo de Valencia san Juan de Ribera a la población, posiblemente para impulsar el bautismo de los moriscos.
La pieza se encuentra ornamentada con motivos plenamente renacentistas, cincelados y repujados. El cuadrón del anverso figura presidio por una imagen de Cristo Crucificado, en los medallones de los extremos las imágenes de la Dolorosa y san Juan Bautista, en la parte superior una alegoría de la Eucaristía con la representación del pelicano alimentando a sus crías con la sangre, y en la parte inferior María Magadalena. El reverso lo preside la imagen de san Miguel Arcángel, titular de la iglesia de Benifallim y patrón de la población, el cual está flanqueado por las representaciones de los cuatro evangelistas, san Juan, san Lucas, san Marcos y san Mateo.
Una vez finalizadas las fiestas patronales de Benifallim, la cruz procesional regresará a la iglesia de Santa María de Alcoy, una de las sedes de la exposición «Camins d’Art», donde permanecerá expuesta hasta que acabe la muestra, prevista para finales de año.