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La Guardia Civil ha realizado hasta el momento más de 5.000 auxilios y rescates en la provincia

La Guardia Civil ha realizado hasta el momento más de 5.000 auxilios y rescates en la provincia
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    La Guardia Civil de Alicante, en lo que va de año 2017, ha llevado a cabo más de 5.000 auxilios y rescates de todo tipo. Desglosándolos por ámbitos, predominan las actuaciones realizadas en carretera (más de 3.500), las de carácter sanitario (1.147), de acompañamiento de personas (239), rescates en montaña (62), rescates en medio acuático (42) y auxilios por incendios o derrumbes de edificios (16), entre otros.

    Es por todos sabido que la Guardia Civil se caracteriza por su incansable espíritu de sacrificio y de ayuda al ciudadano, como así lo demuestran el número de actuaciones que, bajo este código moral de actuación, los agentes pertenecientes a la provincia de Alicante, han llevado a cabo, en lo que va de año, con más de 5.000 auxilios y rescates humanitarios de todo tipo.

    1.138 auxilios sanitarios

    En muchos casos, los agentes de la Guardia Civil son los primeros en tener que enfrentarse a un aviso de carácter sanitario, por ser los primeros en llegar al lugar del suceso y tener que practicar los primeros auxilios, logrando en la mayoría de los casos estabilizar a los afectados hasta la llegada de los servicios sanitarios.

    Son actuaciones que quedan grabadas en la mente de los hombres y mujeres que las realizan, pero sobre todo en las personas que son auxiliadas, como la señora inglesa de 74 años, que se encontraba agonizando en el interior de su domicilio de Moraira el pasado 4 de abril y que, gracias a que los agentes accedieron a su domicilio de forma urgente, se pudo salvar su vida, el atragantamiento del pasado 25 de junio en Dolores, o el niño de 9 años que, tras ingerir unos alimentos de los que era alérgico, fue socorrido por dos agentes cuando iba a entrar en shock anafiláctico.

    Destacable también el caso de Pego, en el que un hombre se electrocutó al intentar liberar una pelota de unos cables de alta tensión, y que gracias a los conocimientos de los agentes, pudieron devolverle a la vida. La rapidez en las intervenciones y los conocimientos en primeros auxilios, fueron determinantes para lograr un final feliz.

    42 rescates en medio acuático

    Sin duda, uno de los tipos de rescate más arriesgados que realizan los Guardias Civiles y en los que más se juegan la vida, son aquellos que se producen en el medio acuático.
    Son de especial relevancia los rescates que tienen lugar en las playas de la provincia, en las ocasiones en las que el mar nos demuestra toda su fuerza, como los casos de Torrevieja, de los días 8 de junio y 19 de julio, donde un total de 4 personas (dos de ellas menores de edad) fueron rescatadas mientras se bañaban en la cala de la Higuera en condiciones extremadamente adversas, y que no podían salir del agua por sus propios medios. En ambos casos, el mismo Guardia Civil, fue el que se lanzó al agua sin pensar en su propia vida, rescatándoles sin lamentar mayores consecuencias que el susto del momento.
    Además de los auxilios en naufragios o en las llegadas de pateras a la costa, los agentes también se enfrentan a situaciones en las que tienen que recuperar cadáveres del medio acuático. Un caso especial fue el del hombre desaparecido en Teulada, que apareció sin vida el 26 de enero en una balsa de la depuradora de agua de la localidad, cuyas aguas altamente insalubres y están llenas de residuos orgánicos, en los que los agentes del el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) tienen que sumergirse.

    62 rescates en montaña

    Este tipo de actuaciones conllevan una peligrosidad extra para los agentes del Equipo de Rescate e Intervención en Montaña (EREIM) de la Guardia Civil, debido a lo complicado de la orografía del terreno y del contexto del resto de condiciones, a pesar de su excepcional preparación. Normalmente se trata de senderistas, escaladores o montañeros que se extravían y se les hace de noche, aunque en ocasiones también tienen la difícil tarea de recuperar los cuerpos de los que no han tenido tanta suerte de volver a salvo. Tenemos reciente el triste recuerdo del hombre que salió "trail running" por la zona de la Cueva de la Luna, en Callosa del Segura y que tras sufrir un accidente, su cuerpo tuvo que ser rescatado de dicho paraje de difícil acceso, con ayuda del Helicóptero de la Guardia Civil.

    16 auxilios y desalojos por incendios o derrumbes

    En estos casos también es esencial la capacidad de reacción y la toma de decisiones de los agentes, que han de dar una respuesta inmediata para salvar vidas, como ocurrió en Pego el pasado febrero, cuando hubo que desalojar un edificio de viviendas que estaba derrumbándose, literalmente, o en Torrevieja hace unos días, donde hubo que desalojar por un incendio a 40 vecinos, entre los que se encontraba un anciano de 87 años con movilidad reducida, que fue evacuado en brazos de dos agentes.

    Cerca de 3.500 auxilios y rescates en carretera

    Son sin duda los más servicios más numerosos, y los más desconocidos por el ciudadano, que hacen los componentes de la Agrupación de Tráfico, que se enfrentan a un amplio abanico de situaciones, desde auxilios por averías mecánicas, como el simple cambio de una rueda, pasando por auxilios sanitarios y hasta rescates de personas atrapadas en vehículos accidentados.

    Cabe destacar la labor de los agentes en las vías alicantinas este invierno, con motivo de los temporales que sufrió la provincia de lluvia y nieve, en las que todos los Guardias Civiles sin excepción, tanto los que tenían servicio nombrado como los que no, incluso algunos encontrándose de vacaciones, todos, se incorporaron a sus respectivos destacamentos, para prestar el apoyo necesario y ayudar a restablecer la circulación en esa situación de emergencia.

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