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El equipo de gobierno recupera el Lavadero de Callosa d’en Sarrià como atractivo turístico

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    El equipo de gobierno recupera el Lavadero de Callosa d’en Sarrià como atractivo turístico - (foto 2)

    Los Servicios Técnicos del Ayuntamiento de Callosa d’en Sarrià han acondicionado el circuito hidráulico del Lavadero de la Font Major para que vuelva a fluir el agua en él. El equipo de gobierno, formado por Compromís y PSOE, ha recuperado este emblemático espacio del siglo XVIII, con el fin de realzar el patrimonio cultural del pueblo y convertirlo en un atractivo turístico dentro del casco antiguo.

    El concejal de Servicios Técnicos, Alfonso Puigcerver, ha señalado que “el lavadero llevaba muchos años sin funcionar y se encontraba en un estado prácticamente de abandono”. En este sentido, el edil ha indicado que “uno de los problemas más reseñables es que se quedaba el agua estancada en sus canalizaciones generando malos olores y la proliferación de mosquitos en su entorno”.

    Puigcerver ha explicado que a través de una pequeña inversión, que ronda tan sólo los 2.000 euros, se han podido poner de nuevo en funcionamiento los caños del lavadero, con el fin de “ofrecer una imagen renovada del casco antiguo de Callosa y conseguir darle un impulso turístico a esta construcción del siglo XVIII que representa una de las estampas más carismáticas de nuestro pueblo”.

    La actuación ha consistido en la instalación de una válvula en una de las arquetas para que el agua que viene de la ‘Parada Major’ pueda reconducirse hacia los caños del lavadero.

    Alfonso Puigcerver ha recalcado además que con esta actuación “no se perderá ni una gota de agua, ya que se aprovechará toda para el riego de agricultores”. De hecho, los trabajos han estado supervisados por la Comunidad de Regantes y Usuarios de Callosa d’en Sarrià.

    El Lavadero y abrevadero fue construido en el año 1783. Tiene doce caños y una capacidad para albergar a más de setenta personas. En el año 1911 se cubrió con un tejado para proteger de la lluvia a las personas que acudían a lavar. Como muestra de la actividad que tuvo antaño, en su piedra se aprecia la huella de los cántaros que se colocaban para lavar y presidiendo la construcción se encuentra un bajo relieve del Rey Jaume I.

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