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Así han evolucionado los dulces tradicionales de Fallas y Semana Santa

Así han evolucionado los dulces tradicionales de Fallas y Semana Santa
  • Algunos hornos se atreven a fusionar lo tradicional con lo moderno en los dulces más característicos de esta época del año

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Así han evolucionado los dulces tradicionales de Fallas y Semana Santa - (foto 4)

Con la llegada de marzo a la Comunitat Valenciana, no solo llegan tiempos de fallas y Semana Santa, también llegan a todos los hornos los dulces más típicos de nuestra tierra. Son muchas las tradiciones que hablan de pasar el día con familiares y amigos mientras nos tomamos uno de estos dulces que vamos a descubrir.

Uno de los más típicos de Semana Santa es el panquemado, con forma redonda e interior esponjoso, contrastado con una capa exterior casi quemada, de la que recibe el nombre. Es uno de los dulces que no puede faltar en la mesa durante este mes.

Otra de las ‘joyas de la corona’ es la tradicional mona de pascua,  elaborado con los mismos ingredientes que el panquemado pero con diferente forma de realizarlos, la mona es más pequeña y aplanada y además se le suele dar formas divertidas, es tradición que las monas lleven un huevo cocido en el interior y unas bolas de anís pequeñas sobre la superficie. Normalmente puedes comer monas durante todo el periodo de Semana Santa, pero lo más común es que el primer lunes de Pascua sea el postre estrella.

Los buñuelos de Cuaresma, como su propio nombre indica, están entre los postres más populares de Semana Santa. Están hechos con agua, leche, azúcar, harina, mantequilla y huevo y tienen origen en la gastronomía de Al-Àlandalus.

Así son los innovadores dulces en Puçol

El Horno Duato en Puçol es uno de esos negocios que llevan prácticamente ‘toda la vida’ en el pueblo realizando todo tipo de dulces, a parte de los productos de un horno tradicional. Desde el año de pandemia, muchos negocios han tenido que reinventarse y el este horno nos ha contado que: “dese la pandemia empezamos a optar por una estrategia totalmente diferente, porque nuestro usuario era un público un poco más maduro y necesitábamos reestructurar el mercado, enfocar nuestros productos hacia otro segmento. Lo que estuvimos haciendo fue una remodelación de nuestros productos estrella artesanales de toda la vida, las monas y los panquemados y los enfocamos de una forma más llamativa.”

“Hicimos diferentes variedades de monas, primero pintamos algunas con chocolate blanco por encima y cambiamos los trocitos de anís, que es lo que te puedes encontrar en cualquier sitio, por trocitos de oreo. Fuimos alternando el chocolate blanco y el normal. Este año, debido al éxito de los pasados tenemos pensado hacer una nueva variedad de Kinder Bueno con galleta Lotus y de Kinder Bueno con Kit Kat, que esperemos que a la gente les guste.”

“En cuanto a los panquemados solemos hacer los que se han vendido toda la vida: el normal, sin ningún tipo de mezcla; el que es solo con nueces, que lleva nueces tanto dentro como por encima; y por último el de pasas y nueces, que es el producto que más vendemos. Pero también hemos hecho algún cambio de los nuestros, los hemos bañados también con chocolates y toppins como las monas, y este año les hemos dado la opción a la gente de rellenarlos con chocolate o nata, que es algo que les vuelve locos.”

Y así es como se junta la modernidad con la tradición en este negocio característico de Puçol, tal y como nos indicaban desde el Horno Duato: “la intención de esta remodelación de los dulces es para “intentar salir un poco del producto tradicional para captar un mercado más amplio enfocado a un público joven y renovado, además queremos darle nuestro ‘toque’ a el dulce tradicional.”

 

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