Profesionales del Hospital de Elche leen un manifiesto de condena por los últimos asesinatos machistas

Dentro de la campaña 1 minuto de silencio: sin tod@s no podemos", las y los profesionales del Departamento del Hospital General Universitario de Elche han realizado un paro en su actividad diaria en repulsa a los últimos asesinatos machista.

Estos paros no sólo se han realizado en la puerta del hospital y centros de salud sino también en las plantas de hospitalización y unidades y servicios donde han contado con la participación de pacientes y familiares. Además en esta ocasión en la puerta del hospital se ha leído un manifiesto de condena a los asesinatos de mujeres sucedidos este fin de semana en Vigo, Santiago de Compostela y Tarragona.

Manifiesto de condenando

En el manifiesto, leído por Nuria Gregori, responsable de igualdad del departamento se ha mostrado la condena a los asesinatos pero también a la violencia, amenazas, coacciones, insultos, vejaciones, humillaciones, acoso sexual, acoso laboral, maltrato psicológico o violaciones que sufren a diario miles y miles de mujeres. También se ha hecho referencia a la violencia contra la mujer que se produce a nivel global con los millones de mutilaciones genitales a mujeres que se cometen a diario en el mundo, las niñas que son obligadas a contraer matrimonio con apenas 10 años, las que son vendidas como esclavas sexuales, secuestradas, abusadas sexualmente o violadas; las que tienen prohibido el acceso a la educación, solo por ser mujeres, por ser niñas, por tener una condición que nadie elige.

En el comunicado también se ha exigido la implicación de las instituciones: dotar con suficientes recursos las políticas públicas y sociales destinadas a la educación en igualdad, a una justicia para todos sin tasas, a una sanidad sin discriminación, a una educación igualitaria, a un trabajo en igualdad de condiciones y salarios que los hombres o a evitar el acoso laboral, sexual y por razón de género e identidad sexual.

El mensaje ha sido claro: "Cada vez que una mujer sea asesinada, todas y todos los profesionales del departamento de salud saldremos a la calle o pararemos la actividad en las unidades y centros de trabajo y todas y todos los pacientes que puedan y sus familiares o cuidadores podrán unirse a los actos de condena. No vamos a tolerar ninguna justificación, venga de quien venga. El silencio nos vuelve cómplices y ninguna mujer, ninguna, merece ser asesinada. El machismo tiene los días contados. No vamos a bajar la guardia, seguiremos trabajando para la consecución de los necesarios avances hacia una sociedad más igualitaria, justa y libre de violencia. NI UNA AGRESIÓN SIN RESPUESTA. NI UNA MUERTE MÁS".

Sistema de notificaciones

Además, el departamento sanitario ha utilizado el sistema de alertas a través del programa Abucasis, utilizado por la mayoría de los profesionales, para que así estén informados convenientemente y puedan participar en las paradas y concentraciones previstas de manera que se de mayor visibilidad a los actos de repulsa.

Campaña "1 minuto de silencio: sin tod@s no podemos"

Esta iniciativa tiene como objetivo hacer partícipe a todo el personal sanitario y no sanitario, así como a pacientes y familiares de la repulsa ante asesinatos machistas y la importancia de mostrar esta condena públicamente.
Hasta el momento, cuando se dan estos casos, se realizaba una parada de la actividad con una concentración en la puerta del Hospital General y en algún centro. Pero se ha comprobado que la participación en este tipo de concentraciones es minoritaria, en muchos casos porque debido a las cargas asistenciales de cada unidad o centro, es imposible bajar al hall del hospital para detener la actividad.

Así, la campaña propone combinar la clásica concentración en la puerta del centro, con paralizaciones de la actividad en las diferentes unidades y plantas, durante un minuto a las doce del mediodía, el día después en el que se ha cometido el acto.

De esta forma se consigue implicar y sensibilizar a todo el personal del centro, y también se conciencian e implican pacientes y familiares. Evidentemente, se da por sentado que en ningún caso se detendría la actividad en situaciones urgentes, únicamente en las rutinarias. En la medida de lo posible, se le pide a paciente y acompañantes que le acompañen. La participación activa de profesionales y de todas las personas atendidas y acompañantes en el centro, se convierte en una potente herramienta y en una importante campaña de concienciación y sensibilización sobre esta lacra social.