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¿Cuáles han sido los peores años de incendios en la Comunitat Valenciana?

Incendio de Bejís
Incendio de Bejís
  • Los fuegos de Bejís y Vall d’Ebo han quemado más terreno en una semana del que se había calcinado en toda una década

Los incendios de Bejís (19.000 hectáreas) y Vall d’Ebo (12.150 ha) han calcinado más hectáreas en una sola semana de lo que se había quemado en toda la década, que desde 2013 sumaba 20.300 hectáreas afectadas por los fuegos.

Si a esto sumamos al de Venta del Moro (1.300 ha) y el más reciente en Les Useres (800 ha), estamos hablando de 33.300 hectáreas calcinadas en la Comunitat Valenciana en el peor verano de la última década.

¿Cuáles han sido los peores años en materia de incendios?

Para encontrar un año tan devastador como este 2022 hay que remontarse 10 años atrás, al 2012, recordado por dos gigantescos incendios, los de Cortes de Pallás y Andilla, que sumados al de Chulilla calcinaron casi 60.000 hectáreas.

El mordisco que dejó el fuego en 2012. ICV
El mordisco que dejó el fuego en 2012. ICV

De hecho, una parte de lo que se ha quemado por el incendio de Bejís ya había sido arrasado en 2012 y estaba en proceso de regeneración, en el triángulo Teresa-Sacañet-Altura.

Además, en los últimos años también destacan otros fuegos como el de Les Useres de 2007 (5.500 ha) o el de Llutxent, en 2018 (3.270 ha), incendios que elevan las estadísticas esos años.

Los años 90, por su parte, fueron especialmente nefastos para los incendios forestales. Desde el año 1990 al 1994 todos los años ardieron más de 20.000 hectáreas (27.000 en el 90, 44.000 en el 91, 26.000 en el 92 ó 26.000 en el 93).

Diez años antes, cabe destacar el año 1979, cuando se produjo el que todavía hoy es considerado el peor incendio de la historia de España: El que se inició el 17 de julio en Ayora y que acabó arrasando 40.000 hectáreas de terreno forestal, desde Teresa de Cofrentes hasta Moixent.

1994, el año en que ardió la Comunitat Valenciana

Pero, con diferencia, 1994 sigue siendo el peor año en materia de incendios forestales: Ardieron 138.400 hectáreas y el 14% de la superficie forestal valenciana, al iniciarse incendios simultáneos por todo el territorio.

La Semana Negra de 1994 comenzó el 2 de julio con incendios en Espadilla (19.310 ha) y Villarluengo (en Teruel, pero que se extendió después hasta la comarca de Els Ports).

El 4 de julio se declararon nuevos incendios en Millares (25.430 ha), Fontanars dels Alforins (18.417 ha), Albaida y Agres. Por si fuera poco, el 5 de julio se inicia otro fuego en Requena (24.064 ha) y el 6 de julio otro más en Alcoi.

La superficie que quemó 1994. ICV
La superficie que quemó 1994. ICV

En total, esa semana se dieron de forma simultánea 8 grandes incendios forestales (de más de 500 hectáreas), lo que sobrepasó a los equipos de extinción, que no tenían tantos efectivos para trabajar en tantos frentes.

La Comunitat Valenciana, cansada y desbordada, vio como ardía gran parte de su territorio. Un mordisco que todavía hoy se deja ver en algunos paisajes. Además, hubo que lamentar la muerte de hasta 14 personas. Solo durante esa Semana Negra 104.000 hectáreas acabaron quemadas.

La mayoría, a principios de julio

Según las estadísticas, la mayor parte de la superficie quemada se da entre la última semana de junio y la primera de julio, aproximadamente el 40% del terreno forestal calcinado.

Sin embargo, aunque de media se quema más superficie en este periodo, la semana con más fuegos (aunque de media con menos terreno quemado), suele ser la del 15 de agosto, especialmente causados por los rayos habituales en el periodo de inestabilidad de mediados de mes.

Estos suponen la principal causa (el 25%), por encima de otras causas humanas como la actividad agrícola (el 21%) o la caza y el control de la vegetación (el 11%). Aun así, el conjunto de las causas humanas llega al 72%: Un 5% por cigarrillos, un 5% por pirómanos o un 2’4% por problemas en las líneas eléctricas.

 

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