Hallan restos de un banquete romano en el yacimiento romano de Burriana
Ostras y caracoles de mar, entre el 'menú' de aquellos burrianenses
Durante esta semana, el alcalde de Burriana, Jorge Monferrer Daudí se ha trasladado a los terrenos de Sant Gregori para conocer de primera mano los detalles del IV Curso Internacional de Arqueología Mediterránea que reúne en la capital de la Plana Baixa a estudiantes de toda Europa. Estos estudios están promovidos por el Aula de Arqueología Mediterránea, con el objetivo de que estudiantes extranjeros puedan conocer nuestro patrimonio arqueológico a través del Museo y las excavaciones.
Durante el encuentro, el primer edil ha podido comprobar la importancia de este curso para proteger y poner en valor la mayor villa marítima romana excavada de la Comunitat Valenciana, datada entre el cambio de era y el siglo IV d.C., situada a unos 75 metros de la costa por lo que se trata de un elemento esencial del patrimonio cultural valenciano, y que “merece ser completamente documentado, protegido y puesto en valor”. Entre los hallazgos arqueológicos más fascinantes se encuentran restos de conchas de ostras y caracoles de mar, lo que sugiere la celebración de un posible banquete romano. Estos vestigios no son solo evidencia de una comida, sino que nos ofrecen una ventana a las costumbres culinarias y sociales de la época.
El Aula de Arqueología Mediterránea fue creada mediante un convenio entre el Ayuntamiento de Burriana y la Universitat Jaume I (UJI), con el fin de llevar a cabo una mayor implantación de la universidad en la ciudad de Burriana, en su entorno, y dar pie a un marco de actividades de investigación, formación y promoción del patrimonio cultural y arqueológico del municipio. Así pues, a través de diferentes convenios con otras instituciones nacionales y europeas, este taller ha atraído hasta la capital de la Plana Baixa a estudiantes y profesores de la Università di Macerata (Italia), la Universidad de Potsdam (Alemania), la Universidad de ELTE (Hungría) y la Universidad Jaume I de Castellón, para potenciar el traspaso de conocimiento a través de la internacionalización y formar a los alumnos en la protección y difusión del patrimonio arqueológico en una dimensión trasmediterránea, a través de sesiones de excavación y extracción arqueológica en la zona de Sant Gregori.
A su vez, también se están realizando los laboratorios del Museo de Arqueología de Burriana, en la que los estudiantes conocen estos materiales extraídos, hasta el momento previo a su restauración y exposición, como cerámica, huesos, y metales, entre otros; para su posterior documentación y registro de los datos de la excavación, todo ello bajo la supervisión del equipo de restauradoras del museo. Además, este novedoso proyecto cuenta con la implementación de las últimas tecnologías gracias al proyecto con el que colabora el museo de Burriana y está liderado por la UJI, la Universidad Politécnica de Valencia y universidades de Italia, y Hungría.
El museo arqueológico municipal es uno de los puntos de desarrollo de un proyecto didáctico europeo relacionado con el patrimonio, donde se digitalizan algunas de las piezas arqueológicas de la capital de la Plana Baixa, y gracias a la realidad aumentada, se crea un área virtual ambientada en el museo burrianense, donde los alumnos pueden excavar virtualmente estos restos arqueológicos.