Amaral: “Hemos vuelto a ese espíritu de intentar transmitir una emoción con nuestra música”

Vivir de la música siempre ha sido para valientes, y en los tiempos que corren lo es todavía más. La crisis sanitaria ha cambiado la forma de hacer las cosas, también musicalmente hablando. Los aforos, la distancia y toda una larga lista de medidas de seguridad han obligado a los artistas a reinventarse o, como es el caso del grupo Amaral, volver a sus orígenes.

En elperiodic.com hablamos con su cantante, Eva, horas antes de que se suban al escenario en Burriana (Castellón) donde actuarán delante de alrededor de 800 personas. Repasamos junto a ella, cómo han cambiado las cosas y cómo se presenta el futuro más cercano.

Puedes leer la entrevista completa, a continuación:

Pregunta: La pandemia ha cambiado muchas cosas, también la forma de hacer cultura ¿Cómo estáis afrontando esta nueva etapa?

Respuesta:  La verdad que como el resto de la población, con desconcierto. Unos días con mucha ilusión y otros con menos. Durante el confinamiento vimos como toda la gira que teníamos preparada no iba a ser posible llevarla a cabo, y nos dio un varapalo aunque luego ese fue el menor de nuestros problema porque conforme avanzaba la situación todo era más crítico.

Lo que si nos trajo mucha ilusión y ganas de salir a la carretera fue el hecho de que pudiéramos hacer estos conciertos acústicos y con aforo reducido, y que por lo menos tuviéramos esta ventana de poder hacer música en directo. Nos hacia ilusión salir a la carretera y de alguna manera dar vida a parte de nuestro equipo que de otra manera iba a estar absolutamente parada. Preparamos estos conciertos con mucha ilusión.

P: Muchos de vuestros compañeros de profesión se han visto obligados a suspender sus conciertos, pero vosotros habéis seguido adelante ¿En que han cambiado vuestras actuaciones?

R:  Nuestros conciertos iban a ser en grandes escenarios, con una escenografía muy artística donde había intervenido un equipo humano muy grande. Era todo un gran proyecto artístico que nos había ilusionado muchísimo en los últimos meses y que llevábamos prácticamente dos años preparando, pero eso no va a poder ser.

Es verdad que al reducir todo ese proyecto nos hemos ido a la esencia de las canciones, y las hemos preparado con guitarra y voz que en el fondo nacieron así. Nuestro último disco, si que es verdad que era más en ese mundo de sonidos electrónicos, pero en el fondo no dejaban de ser canciones que tenían ese vestido.

P: Podríamos decir que habéis vuelto un poco a vuestros orígenes…

R: Sí, y la verdad que disfrutamos mucho recreándonos en la belleza de la melodía o de un arreglo de guitarra que combinado con la voz genera un ambiente. Hemos vuelto a ese espíritu de intentar transmitir una emoción, algo que es muy sencillo porque estamos todos muy fáciles de emocionar, sinceramente.

Enseguida estamos con los pelos de punta e incluso con el nudo en la garganta antes del concierto…. Estamos más sensibles en general como sociedad, para lo bueno y para lo malo.

P: Vosotros habéis adaptado vuestro espectáculo pero ¿ha cambiado también la forma de reaccionar del público?

R: Nosotros teníamos esa parte de conciertos en salitas pequeñas que hacíamos sin anunciar con dos guitarras, Juan y yo, que eso no lo hemos perdido nunca. Lo hacíamos de manera muy esporádica, pero este verano ha sido lo único que hemos podido hacer (risas).

La forma del público de reaccionar es especial, muy especial. Es una sensación como de que todos hemos pasado juntos por algo muy fuerte, que nos ha golpeado a todos. Todos hemos vivido esta situación juntos y hay una necesidad de poner en común eso, aunque no nos podamos acercar y solo nos hayamos podido ver por las pantallas de los móviles o el ordenador en muchos casos. Pero si que es verdad que estar juntos en un concierto, aún a distancia y con mascarilla, no impide esa cercanía y lo notas desde el primer momento en el que sales al escenario.

Hay esa necesidad de emoción y de disfrutar de algo aunque solo sea durante un momento y de intentar olvidar por un ratito lo que nos ha pasado. El ánimo a partir de ahora va ser muy importante para poder aguantar lo que nos queda.

P: Pese a esas ganas de la gente de poder volver a hacer cosas que no hemos podido en los últimos meses, sigue dando cierto respeto acudir a un concierto ¿Qué le dirías a esta gente para que apuesten por ello y por la cultura española?

R: Durante nuestra experiencia en estos conciertos hemos estado encima para saber cómo se organizaban, también para tener esa seguridad porque somos humanos y todos tenemos que ser muy escrupulosos. 

Estos conciertos siempre se organizan con una entrada escalonada de gente para que no haya ningún contacto ni posibilidad de aglomeración, la gente se sienta a distancia, toma de temperatura, gel… está todo muy bien organizado.

Si alguien tiene miedo, no me siento capaz de convencerle porque hay que respetar los sentimientos de las personas, pero si alguien tiene ganas de disfrutarlo tiene que saber que no es como antes, no es un concierto como lo de antes, es una posibilidad de disfrutar de la música y de la cultura adapta a las circunstancias que estamos viviendo. No se esperen, ni para lo bueno ni para lo malo, algo como lo de antes.

Pero si que es verdad que tiene momentos emocionantes y que se puede disfrutar de estos conciertos. La magia está en otro  lugar, no está en que estemos todos juntos de la mano, pero bueno estamos todos juntos en espíritu de alguna manera.

P: Desde el escenario ¿notáis que la gente está comprometida con las medidas de seguridad?

R: Si, desde luego. Todo el mundo es muy cuidadoso y muy respetuoso. Creo que todo esto es una cuestión no solo de no enfermar uno mismo, sino de no ser participe de un contagio general. Eso se está notando muchísimo.

P: Este jueves estaréis en Burriana ¿Cómo va a ser el concierto?

R:  Vamos a hacer un recorrido por nuestra carrera combinado canciones de antes con las de nuestro último disco, y llevadas a este territorio de cómo son las canciones cuando nacen a través de un diálogo con el público mostrándoles como son los hilos por dentro de las canciones. También dejando muchos momentos a la improvisación y a donde nos lleve la canción sobre el escenario. Es algo muy bonito que nosotros disfrutamos mucho.

P: Por último, ¿qué os deparan los próximos meses? ¿Tenéis algún disco nuevo en mente?

R: Tenemos pendientes algunas colaboraciones con amigos - que de momento serán a distancia - muchas ideas de canciones nuevas que iremos poniendo en común y maquetando, y no sabemos si se podrán volver a retomar los conciertos. Iremos enfocando nuestra creatividad hacia cosas más íntimas.