Los patios escolares de Alzira se convierten en espacios verdes, educativos y sostenibles
El Ayuntamiento de Alzira está llevando a cabo actuaciones de renaturalización, revestimiento y permeabilización de los patios escolares de la ciudad. De momento, ya se ha empezado a trabajar a los CEIP Blasco Ibáñez i García Lorca.
El objetivo es crear entornos más naturales, relajantes y confortables y reducir el calor que reciben los patios, un hecho que preocupa a las familias y en la comunidad docente y que afecta sobre todo, a los niños y niñas que utilizan estos espacios.
Al CEIP Blasco Ibáñez se ha actuado sobre una superficie de 860 m² de solera de hormigón para su sustitución por tierra vegetal , donde se plantarán 17 árboles y un sistema de riego automático para la vegetación.
Por otro lado al CEIP Garcia Lorca, se han demolido 756 m² de solera de hormigón para su sustitución por tierra vegetal, y se plantarán otros 17 ejemplares con su sistema de riego.
Entre otros, las especies vegetales son: Bahuinia Variegata (Falsa caoba), Albizia Julibrissin (Acacia de Constantinopla), Morus Alba Pendula (Morera péndula) Prunus Cerasifera (Ciruelo mirobolano) o Hibisco Syriacus (Rosa de Siria)
En concreto, se pretende actuar sobre las zonas llamadas duras, espacios dominados por superficies de hormigón asfalto con nula presencia de vegetación y escasa sombra que tienen estos patios; es decir, los espacios destinados a juegos de equipo como el fútbol.
Alfons Domínguez, alcalde de Alzira, explicaba que estas superficies acumulan más calor en los meses más cálidos, provocando un sobrecalentamiento de las aulas y un aumento en el consumo de energía para refrigeración. “Tener espacios para juegos de equipo es bueno, pero no tendría que ser la única ni principal opción de los patios.
La intención es transformar parte de estas zonas, manteniendo algunas para pistas deportivas, pero también crear otros espacios que permiten que el agua de lluvia no se pierda por las alcantarillas sino que lo asuma la tierra y aumentar así la vegetación a esas áreas. De este modo el alumnado puede disfrutar de los patios para su bienestar personal y, de , disponer de más sombra para hacer frente a las altas temperaturas”.
La intervención, subvencionada por el Plan abierto de Inversiones de la Diputación de València 2024- 2027, está llevando a cabo un conjunto de actuaciones que incluyen:
- Eliminación de superficies de hormigón y sustitución por pavimento permeable.
- Creación de zonas ajardinadas con plantas autóctonas y adaptadas al clima local.
- Plantación de árboles con función de sombreado, seleccionados por su bajo consumo hídrico y por su valor ecológico y pedagógico.
- Incremento de la biodiversidad y del valor paisajístico de los espacios escolares.
- Mejora de la capacidad de absorción del suelo, para reducir el impacto de lluvias intensas.
Los árboles seleccionados, tanto de hoja caduca como perennes, no solo mejorarán el confort térmico, sino que también contribuirán a la retención de partículas contaminantes en suspensión, mejorando la calidad del aire y aumentando la infiltración de agua de lluvia. Además, se ha tenido en cuenta la estética, la variedad de colores, y el valor educativo de cada especie para enriquecer la experiencia del alumnado.
Cómo explica el paisajista Vicent Ordaz, “los centros escolares deben de estar dotados de tres partes para el esparcimiento del alumnado: el patio activo, que son las pistas deportivas que actualmente ya están en los centros, el contacto con la natura y el juego pasivo, estas dos últimas las conseguiremos con la inclusión de la natura que propicia poder jugar al escondrijo, jugar a ajedrez o hacer confidencias.
Con esta actuación se quieren garantizar esos tres espacios que son más integradores, porque la natura es neutra, no potenciamos un deporte en concreto como en el caso de las pistas, no hay exclusión por sexo. A la natura todos juegan por igual, a trastear, a hacer hoyos, esconderse y a ser aventureros y vivan cosas diferentes cada día”
Con esta actuación, Alzira da un paso firme hacia unos espacios escolares más saludables, resilientes y conectados con la natura, poniendo en el centro el bienestar de la infancia y la adolescencia.