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La Basílica de la Virgen de los Desamparados instala la restaurada talla original de la patrona de Valencia

  • Por primera vez en 350 años, queda al descubierto la talla original del siglo XV

  • El rostro y la expresión se mantienen idénticos, y la vara de mando y su fajín de capitana general otorgado en 1810 han sido colocados a sus pies

La imagen original de la Virgen de los Desamparados, patrona de Valencia, ha vuelto hoy de nuevo a su camarín de la Basílica de la Virgen de los Desamparados, después de haber sido restaurada durante los últimos cinco meses en dependencias de la propia Basílica.

Por primera vez después de más de 350 años, la talla gótica original del siglo XV, de la que hasta ahora sólo podía verse la cara y una mano, se muestra en su totalidad en su parte frontal, al haberle sido retirado el escapulario que la tapaba.

El rostro y la expresión de la imagen se mantienen idénticos, y la vara de mando de alcaldesa honoraria así como el fajín de capitana general, título que le fue otorgado en 1810, han sido colocados a los pies de la imagen.

La intervención, que ha sido realizada por un equipo de técnicos de Cultur Arts de la Generalitat, dirigidos por Carmen Pérez, promovida por la archicofradía de la Virgen en colaboración con la fundación Hortensia Herrero,“ha permitido consolidar la imagen ante el deterioro que el tiempo había producido, y dejar al descubierto la talla original de la Virgen”, ha indicado a la agencia AVAN el rector de la Basílica de la Virgen, Juan Bautista Antón.

De igual manera, “los honores que le ha tributado la historia, la vara de mando de alcaldesa honoraria y el fajín de capitana general desde el año 1810, se lo hemos puesto no encima de la imagen, como hasta ahora, sino a los pies como pleitesía que la autoridad del pueblo tributa a la patrona”, ha añadido.

Vestida con un manto de finales del siglo XIX
La imagen ha sido vestida con el manto del capellán Mata, capellán mayor de la Basílica cuando era capilla mayor a finales del siglo XIX, un tejido de “tisú bordado en plata, con las joyas más características que siempre ha llevado al imagen”, ha añadido el rector.

La Mare de Deu dels Desamparats lleva al cuello una gargantilla, “hecha de piezas antiguas que estaban depositadas en lo que antes era Monte de Piedad, todas ellas inventariadas”, ya que “siempre la Virgen ha llevado el 'collaret´ desde el principio y “hemos querido conservarla”.

Las joyas que no desaparecieron en la guerra “se han aprovechado para mejorar la corona, la aureola, la cruz del niño, y también, para las azucenas que tiene la patrona en su mano, que brillan ahora al habérselas incorporado algunos de los brillantes que tiene”.

“Que aumente el sentido de filiación a la Madre y de fraternidad a los necesitados”
El camarín de la Virgen también ha sido restaurado y “es la joya arquitectónica de la Basílica, a mi modo de entender por la proporcionalidad, la construcción y sobre todo por el sentido íntimo que tiene al ver tan cerca de la Virgen”, ha añadido el rector.

El rector de la Basílica de la Virgen ha expresado, finalmente, su deseo de que, con esta restauración y el retorno de la imagen de la patrona, “nos sintamos más hijos aún de tan buena Madre, aumentando en nosotros el sentido de filiación hacia la Virgen y de fraternidad y caridad a los más desamparados, y que sea un vínculo de paz y de unidad en todos nosotros”.

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