La Alcaldesa recuerda que el ajuste de sueldos en la EMT se planteó, precisamente, para evitar despedir personal
Respecto a la imputación de los ex consejeros de Bankia, subraya que “una imputación no es una condena”
La Alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha recordado esta mañana que el ajuste de los salarios en la Empresa Municipal de Transportes, EMT, se planteó “precisamente para no tener que tirar a 208 personas a la calle”. A preguntas de los periodistas, que la han abordado al término de su reunión con el Presidente Autonómico de Cruz Roja, con motivo de la celebración en Valencia del próximo Sorteo del Oro, el 19 de julio, la Alcaldesa ha señalado que “el ERE (Expediente de Regulación de Empleo) siempre se ha planteado para no tener que despedir personal”.
Como es sabido, la EMT anunció ayer la presentación del expediente, tras el que se planteará un calendario de reuniones con los sindicatos, por un periodo de un mes, para concretar los detalles de la acción. La Alcaldesa ha recordado que esta medida (el ajuste de los sueldos) pretendía evitar los despidos, “pero no se lo han creído”, ha concluido, en referencia a los representantes sindicales.
Los periodistas han preguntado a la Alcaldesa también sobre otros asuntos de actualidad, como la imputación de los ex consejeros de Bankia, aunque Barberá ha asegurado que el asunto “está mucho más que comentado”, y ha recordado que “ante una denuncia general de UPyD, el juez ha llamado a la gente a declarar, dado que no tiene suficiente información para decidir nada de la apertura o no de juicio”
En este sentido, la Primera Edila ha explicado que es diferente la responsabilidad ejecutiva o no de unos consejeros y otros”, y ha lamentado que se esté “cambiando absolutamente el sentido de la palabra imputación”. “Imputar –ha asegurado- es un momento de defensa de la persona llamada a declarar –ha explicado- supone que se le insta a que acuda con su abogado defensor, pero no es una condena”, y ha reiterado “el derecho a la presunción de inocencia por encima de todo”. “Que actúe la justicia –ha concluido- no tengo nada más que decir”.
