Compromís per Vila-real solicita el endurecimiento de las penas por maltrato o abandono de animales
El grupo municipal de Compromís per Vila-real ha presentado una moción para su debate y aprobación en el próximo pleno ordinario del Ayuntamiento en la que solicita el endurecimiento de las penas por maltrato o abandono de animales.
Desde la formación política muestran su respeto y admiración hacia las asociaciones locales que trabajan cada día velando por el bienestar de los animales que viven en la calle, "en ocasiones con recursos y personal mínimo, pero con un único objetivo: que todo ser vivo tenga una vida digna en un entorno en el que se le respete", tal y como asegura el concejal Santi Cortells.
Como partido ecologista, Compromís considera que "se están alcanzando unos límites inaceptables en pleno siglo XXI", ya que "prácticamente todos los días vemos noticias en los medios de comunicación en las que se habla de animales torturados y maltratados a cargo de sádicos que nunca acaban pagando la pena suficiente por este comportamiento incívico e inhumano y eso debe cambiar", indica.
El grupo municipal considera que la justicia "no es lo suficientemente justa ni ejemplarizante con estos casos, lo que demuestra que cualquier puede hacer daño a un ser indefenso, porque al final nunca pasa nada". Desde burros apaleados, gatos tiroteados o quemados vivos, perros ahorcados o ahogados en ríos con pesados bloques de hormigón atados al cuello al finalizar la temporada de caza e incluso caballos asesinados en fiestas, "aquí todo vale", lamenta Cortells.
En este sentido, recuerda casos como el del vídeo viral en el que un cazador ahoga repetidamente a un jabato en una acequia, que finalmente se ha saldado con una multa de 720 euros. No se sabe nada todavía sobre la pena que recaerá sobre la familia que adoptó a un perro y lo maltrató hasta la muerte para acabar conviviendo con su cadáver en la cocina durante tres meses, en Valladolid. Ni tampoco qué ocurrirá con la joven que torturó a un gato al meterlo en la lavadora hasta provocarle la muerte y subió las imágenes a las redes sociales, en Ciudad Real. Sí que se conoce ya que por primera vez un español irá a la cárcel por matar a palos a un caballo de carreras de su propiedad tras un mal resultado en una competición. Y también hay una condena en firme a una valenciana que mató al perro de su compañero de piso tras lanzarlo por el balcón. "Estas noticias de justicia y de condenas que acaben con los autores materiales en prisión llegan con cuentagotas, porque la ley es muy laxa en este sentido", explica el edil nacionalista. El Código Penal cuenta desde 1995 con el artículo 337, que fue reformado por última vez en 2016, en el que se estipulan las penas para quienes maltraten o causen lesiones que menoscaben gravemente la salud de un animal doméstico o que vive bajo control humano. Sin embargo, Cortells lamenta que "las penas que se imponen son de risa y no provocan que la gente se lo piense dos veces antes de cometer esas aberraciones".
Así, la moción presentada al próximo pleno exige al Gobierno central un endurecimiento de las consecuencias de maltratar o abandonar a un animal, proponiendo un mínimo de dos años de cárcel y un aumento significativo de las sanciones económicas. También se solicita incrementar la duración de las medidas de inhabilitación especial hasta diez años para el ejercicio de cualquier profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales, así como establecer una inhabilitación especial durante diez años para la posesión de animales domésticos y privar del derecho a la tenencia de armas durante el mismo período a los condenados por maltrato. El texto, además, pide que se cambie la redacción del artículo 337, eliminando el requisito de que el maltrato, para ser condenado, debe ser injustificado, "pues todo tipo de maltrato es injustificado de por sí", aclara Cortells.
"No podemos tolerar seguir viendo animales torturados o mutilados en las redes sociales, ni abandonados a su suerte en nuestras calles, no se debería normalizar que en pleno siglo XXI haya gente sin escrúpulos y cruel que siga sin valorar un animal como una vida que merece el mismo respeto que el resto", afirma. "Queremos más concienciación y educación en el respeto por la vida, sea humana o animal, y que todo aquel que cometa un acto de estas características pague con una condena acorde al delito que ha cometido, sin que para ello valga una simple multa".
