El turismo recibe con recelo las propuestas de desescalada: “No pensamos que podamos salvar la temporada”
El plan de vuelta a la nueva realidad del Gobierno permitirá abrir a los hoteleros a partir de junio, si todo va bien, y con muchas condiciones
Con la llegada del verano a la vuelta de la esquina los miedos entre el sector hotelero continúan creciendo y miran con mucho recelo la manera en la que van a afrontar esta nueva temporada veraniega.
Su proceso de vuelta a la nueva normalidad también estará regido por el plan de desescalada presentado aprobado por el Consejo de Ministros, desde donde les dan luz verde para volver a abrir sus puertas a partir del 11 de mayo pero sin poder utilizar las zonas comunes y con la obligación de desinfectar y reforzar las normas de salud e higiene de los establecimientos.
Un escenario, que se prolongará hasta el mes de junio para cuando la normalidad comenzará a ser más patente. Será una normalidad relativa, pues el aforo seguirá estando limitado a ½ de lo habitual lo que supondrá importante pérdidas para el sector.
Desde Turisme Comunitat Valenciana se muestran relativamente optimistas con la situación del sector e incluso dejan abierta la puerta a poder disfrutar de las playas en la temporada estival, aunque reconocen que existe cierta incertidumbre en estos momentos.
“A pesar de que se ve luz al final del túnel siguen habiendo incertidumbres por que dependemos del patrón de consumo y de la voluntad de la gente de viajar” explica Francesc Colomer, secretario autonómico de turismo, en declaraciones al programa InterCafé de Intereconomía Valencia recogidas por elperiodic.com.
En este mismo sentido, Colomer valora el esfuerzo que están realizando los hoteleros a quienes insta a aprovechar estas circunstancias para “además de mantener las constantes vitales, ganar espacio de negocio para cuando que el sector vaya regresando a la normalidad”.
La peor pesadilla
“Es la peor de las pesadillas para el sector” reconocía el responsable del turismo valenciano, quien considera que es necesario que todas las administraciones flexibilicen los trámites para paliar en la medida de lo posible el impacto negativo del COVID-19 en este sector.
“Tenemos un fenómeno que transcurre por toda Europa, que es el miedo, ahora tendremos que combatirlo y acostumbrarnos a convivir con todas estas precauciones durante muchos meses” insiste Colomer.
Entre tanto optimismo, la Asociación Empresarial Hotelera de Benidorm y la Costa Blanca (HOSBEC) en representación del sector no comparte la visión propuesta por el gobierno, y así lo ha manifestado en este mismo programa: “No pensamos que podamos tener una temporada salvable” asegura Nuria Montes.
“El turismo nacional no va a ser suficiente, ni siquiera para salvar la temporada. Tenemos un turismo nacional que estará sometido a muchas tensiones “ aseguran desde HOSBEC, al tiempo que insisten en que este tipo de decisiones hacen que el sector viva “en una montaña rusa permanente”.
Lo constataba también la asociación en un comunicado en el que valoran la puesta en marcha del plan de desescalada: “En las condiciones que ha planteado el presidente Sánchez, la apertura de establecimientos hoteleros en estas fases de desescalada es muy complicada: por un lado, porque las limitaciones de aforos y servicios son difícilmente compatibles con la propia actividad turística y, por otro lado, porque permite abrir hoteles sin que permita a la vez los desplazamientos de clientes y turistas lo que es una incongruencia manifiesta”.
Con todo ello, piden al Gobierno de Pedro Sánchez que ponga en marcha un plan específico para el sector turístico español el cual, a su juicio, debe pasar por la ampliación de los ERTES, la exoneración del 100% de la cuota empresarial a la Seguridad Social para todo tipo de empresas independientemente de su tamaño, y de la misma manera hay contemplar en este plan la carencia de 12 meses en la amortización de capital de las deudas hipotecarias, que se recuperará al final de la vida de cada préstamo.
