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Un millar de personas se concentran en Picanya por la joven asesinada en Paiporta

    Un millar de vecinos de Picanya han guardado cinco minutos de silencio este mediodía en una concentración de protesta por el asesinato de la joven natural de esta localidad y que murió el pasado domingo en Paiporta tras ser agredida con arma blanca a la salida del bar en el que trabajaba.

    Los padres, hermana y otros familiares de la fallecida, así como el alcalde de Picanya, Josep Almenar, y el de Paiporta, Vicent Ibor, han asistido a este acto en la plaza España de la localidad, arropados por los vecinos y junto a una pancarta con el lema "Todas y todos somos Carolina".

    El alcalde de Picanya ha leído un discurso en el que ha expresado la conmoción del pueblo y un primo de Carolina ha leído una carta para su familiar en la que afirmaba que "no entendía ni encontraban explicación" a su muerte.

    Tras los cinco minutos de silencio, se ha escuchado música clásica y la canción de "El cant dels ocells", de Pau Casals.

    El alcalde de este municipio, Josep Almenar, ha condenado el crimen al que ha calificado de "execrable" y ha afirmado que "la familia está destrozada".

    "Tanto desde Picanya como desde Paiporta, lo estamos viviendo como algo imposible de creer", ha manifestado.

    Almenar ha explicado que acompañó ayer a la familia de Carolina y visitó por la tarde a la familia de Susana, la compañera de trabajo de la víctima, que también fue agredida por el presunto autor de los hechos, y sigue hospitalizada en estado grave en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital General de Valencia.

    Los hechos ocurrieron cerca de la medianoche del pasado domingo en la plaza de la Casota de Paiporta, cuando, según fuentes policiales, las dos mujeres habían cerrado el establecimiento del que ambas son socias y se dirigían hacia su coche.

    Fue entonces cuando el detenido, de 30 años y nacionalidad marroquí, se acercó a las mujeres para agredirlas, y aunque una de ellas, Susana, de 29 años, logró huir tras resultar herida de gravedad, la segunda, Carolina de 23, no lo logró y murió víctimas de heridas de arma blanca.

    Aunque inicialmente logró huir, el agresor fue detenido poco después en el paso elevado de la carretera CV-400, en el cruce con la calle San Vicente de Valencia, gracias a la colaboración de las policías locales de Valencia y de Mislata, y fue trasladado a las dependencias de la Guardia Civil, que dirige la investigación.

    Fuentes de la Policía Local de Paiporta han informado que las investigaciones estudian la posibilidad de que detrás del crimen hubiera un móvil sentimental, aunque han descartado que la causa haya sido un robo o una pelea.

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