La Mancomunitat de la Ribera Alta ha formado a 10 personas en riesgo de exclusión social como profesionales de la hostelería
La Mancomunitat de la Ribera Alta ha finalizado la formación de 10 personas como cocineros mediante un Taller de Formación e Inserción Laboral (TFIL) que se ha celebrado en Rafelguaraf y en el que las personas participantes, además de aprender todas las técnicas culinarias, han realizado 100 horas de prácticas en restaurantes.
En este taller, con una duración de 500 horas, han participado personas que cuentan con una certificación de servicios sociales que acredita su situación de riesgo de exclusión social. Asimismo, además de la formación, las tutorías individualizadas con el alumnado han permitido realizar un seguimiento de su evolución a lo largo del taller, “lo que ha facilitado una mejor inserción sociolaboral”, ha señalado la presidenta de la Mancomunitat de la Ribera Alta, Rosa Sebastià, quien ha precisado que “mediante este tipo de talleres se consigue una doble finalidad; por una parte formar a personas desempleadas en un oficio en concreto, y por otra, tratar la inserción sociolaboral de este colectivo desfavorecido”.
El contenido de la formación ha consistido en la preparación y la manipulación de toda clase de platos y alimentos. El periodo de aprendizaje se ha iniciado con la manipulación y conservación de vegetales, legumbres, cereales y setas, de modo que se han explicado las particularidades de esta clase de productos, incluyendo su estacionalidad, las categorías comerciales y los modos de presentación más apropiados. Los integrantes del taller han aprendido a desinfectar, cortar, cocinar y presentar los platos, además de conocer las técnicas más apropiadas para su conservación.
Los pescados, crustáceos y moluscos han sido otros de los alimentos manipulados por el alumnado del taller, que han aprendido todo lo concerniente a las herramientas para tratarlos, así como las diferentes especies existentes, su calidad y estacionalidad.
En este apartado dedicado a las especies marinas se ha realizado especial hincapié en su limpieza, el mantenimiento de la temperatura adecuada para su preservación, los envases apropiados y los diferentes modos de conservación, como el salazón, el enlatado, ahumado o al vacío. Asimismo también se han mostrado las diferentes formas de consumir este tipo de alimentos; en vinagre, ceviche, pescados marinados y carpaccio, entre otras.
El último tipo de alimento que se ha tratado en el taller ha sido la carne, donde se ha incluido la formación sobre todas las clases existentes de este producto; de vacuno, ovino, caprino, porcino, aves de corral y caza. Dentro de este módulo se ha explicado cómo conservar este alimento, sus diferentes tipos de cocción y la presentación final. Además, para completar la formación, los participantes han adquirido conocimientos sobre la elaboración de postres y dulces diversos.
Como complemento a la formación específica sobre cocina, el alumnado también ha recibido información acerca de las herramientas para la búsqueda de empleo. De este modo los integrantes del curso han aprendido cómo elaborar un currículum y una carta de presentación adaptada al puesto de trabajo que se busca. Asimismo, los formadores han detallado las técnicas y recursos disponibles para la búsqueda de empleo por cuenta ajena, los canales de búsqueda más habituales y otras ofertas educativas disponibles, en el caso de que deseen continuar con su formación.
