Graffitea Cheste termina con un paseo guiado por los es-pectaculares murales de la edición de 2020

El festival Graffitea Cheste 2020 finalizó con seis visitas guiadas por los muros intervenidos en esta edición. Todas con salida desde la Plaza II República, guardando las medidas de seguridad e higiene, con aforo limitado a 20 personas por grupo, y con una duración de 90 minutos. Además, la explicación de los murales contaba con traducción simultánea a lengua de signos.

La instalación que el colectivo artístico Trashformaciones ha realizado en la quinta edición de Graffitea, ubicada en la plaza II República, sirvió como punto de encuentro para comenzar la visita a los murales y, a partir de ahora, también será el punto de información del festival, donde el/la visitante podrá escanear un código QR y conocer más acerca de este evento cultural. “Los artistas de Trashformaciones han dado forma a esta, utilizando residuos que se generan en un festival de arte urbano, en este caso se trata de botes de espray de la conocida pintura Montana 94”, explicaba Toni Espinar, muralista y organizador de Graffitea Cheste, junto a la concejalía de Cultura. “Ellos dirigen una empresa de gestión de residuos y compaginan, o más bien combinan, este trabajo con sus proyectos artísticos. Utilizan objetos que ya no sirven para darles un nuevo sentido, creando instalaciones como esta instalación hecha con botes de espray que han sido totalmente aplastados”.

Durante cada ruta se hizo un recorrido por diez de los once graffitis de la edición 2020, pasando así por todas las manifestaciones artísticas que se encuentran dentro del casco urbano, sin parada frente a la obra de Jorge Ochagavía, en el pabellón deportivo municipal, ni por las obras de las artistas participantes en el encuentro Feminist-Art, celebrado en los túneles del polideportivo dentro de la programación del festival. “Hemos decidido centrar las rutas en el casco urbano para evitar largas distancias, porque las visitas están abiertas a todo el mundo y nuestra intención es que sea un paseo accesible a todos y todas; además de rentabilizar el tiempo que tenemos para ver el máximo número de muros”, explicaban las guías. Debido a las lluvias de la semana pasada, algunos/as de los/as artistas no habían terminado sus obras, por lo que los y las asistentes pudieron verles trabajar e, incluso, preguntarles. En todas las paradas en las que quedaban artistas interviniendo, el público se despidió de ellos/as con un aplauso.

Tal y como explicaron en las visitas, Graffitea Cheste 2020 ha estado ligado a la celebración del 700 aniversario de la Carta Puebla de Cheste, con lo que las intervenciones han vinculado sus temáticas con los lugares en los que se realizan. A su vez, esta acción, está relacionada con un proyecto de códigos QR instalados en distintas calles de la localidad, que cuentan la historia de dichos entornos.

Así, se rindió homenaje a Vicente Blasco Ibáñez o a Rosalía de Castro, entre otras personalidades, en las calles con nombre homónimo. Otras calles, como la Rey Don Jaime, Herrería  o Castilla cuentan con interpretaciones de los y las artistas acerca de la historia de esa vía, de los personajes vinculados a ellas o de lo que éstos/as les inspiran. De esta forma, Xelon presentaba en su muro a un Don Jaime que, en lugar de conquistar tierras, intenta conquistar el corazón de una mujer, armado con la que puede ser “la llave de su corazón”; Galleta María visibiliza a mujeres herreras y de otros oficios en los que su figura es poco reconocida; o Gómez muestra un impactante retrato de Juana de Castilla, llamada “La loca”, como símbolo de esa región que da nombre a una de las avenidas principales de Cheste.

“No todos los festivales cuentan con la cantidad de artistas que participan en Cheste cada año; esto da lugar a que aquí confluyan distintas técnicas y estilos y que, en un paseo por las calles del municipio, podamos tener la posibilidad de disfrutar de esta variedad”, comentaba la concejala de Cultura, Mª Ángeles Llorente, durante la visita a los murales. “Uno de los objetivos de Graffitea era contar con un itinerario muralístico de calidad y afianzar nuestro municipio como destino turístico y cultural; y lo hemos conseguido. Seguiremos trabajando en esta línea para ser punto de referencia en el mapa del arte urbano español”.