Contelles: “La pésima gestión de la Diputación de Valencia ha enterrado el Sona la Dipu”
La portavoz del Grupo Popular de la Diputación de Valencia, Mari Carmen Contelles, ha lamentado que “la pésima gestión de la Diputación de Valencia ha enterrado el Sona la Dipu. La provincia de Valencia pierde en 2019 un referente cultural y de promoción musical tras una gestión desastrosa y plagada de incidencias en esta legislatura”.
Por su parte, la portavoz popular ha señalado a la diputada provincial socialista de Juventud, Isabel García, como máxima responsable de la debacle en la gestión de un programa consolidado y de gran relevancia en la vida cultural de la provincia.
Según Contelles “como triste colofón a esta legislatura, la diputada socialista ha decidido echar el cierre definitivo al Sona la Dipu ante la pésima gestión arrastrada durante los últimos años. Sorprendentemente, la Diputación ha decidido enterrar una iniciativa que nació con el ánimo de fomentar la creatividad musical y el lanzamiento de nuevos valores de la música entre la juventud de la provincia”.
Para la portavoz, “los grandes damnificados de esta drástica decisión son los grupos de música emergentes de la provincia que pierden una plataforma de promoción y los municipios que no podrán contar con la oferta musical que proporcionaba el certamen”.
“Querer enmascarar en un mero traspaso de competencias a la Generalitat la desaparición del programa provincial de promoción musical no es más que un intento de tapar el fracaso estrepitoso en la gestión del mismo”, ha criticado Contelles.
Los populares han recordado que las últimas ediciones del Sona la Dipu se han visto salpicadas de polémicas que han eclipsado la verdadera filosofía del certamen.
El grupo popular de la Diputación de Valencia ha denunciado durante la legislatura el sectarismo a la hora de elegir las localidades escogidas para albergar las semifinales y finales del Sona la Dipu que consecutivamente se han celebrado casi en exclusiva en municipios donde gobierna el PSPV y Compromís.
Además, el certamen de 2017 fue polémico por el concierto de David Bisbal en Ontinyent, localidad de la que es alcalde el expresidente de la Diputación de Valencia detenido e imputado en la Operación Alquería, Jorge Rodríguez. Un concierto por el que la Diputación pagó más de 86.000 euros de la caja de fija habilitada en el área de Bienestar Social.
Por último, en la edición de 2018, tal y como recuerdan desde el grupo popular, el protagonismo no ha sido para el grupo vencedor, sino para la denuncia por impagos de los grupo participantes en ediciones anteriores que se agruparon bajo la plataforma “Debe la Dipu”. Los grupos mostraron públicamente sus quejas ante una gestión deficiente de un certamen que ha crecido en presupuesto en la legislatura pero ha decrecido en relevancia por la paupérrima gestión.
Para finalizar, la portavoz popular ha subrayado “resulta elocuente de la mala gestión que el Instituto Valenciano de Cultura recoja el testigo para 2020 siempre que sea sin deudas y sin lastre”.
