Una aseguradora deberá indemnizar con 1.350 euros a un valenciano por una granizada

En la tabla resumen de las coberturas de su póliza de hogar figuraban con total claridad "fenómenos atmosféricos" como el "pedrisco". Sin embargo, Línea Directa pretendió negarle la indemnización por los desperfectos de una granizada particularmente violenta. Luego quiso pagarle solo una sexta parte. La persistencia de FACUA Comunidad Valenciana ha conseguido el ingreso de los 1.350 euros de la reparación, ya en poder del socio.

El Este peninsular es conocido, entre otras cosas, por la gota fría: potentes precipitaciones, a menudo torrenciales, sobre todo en primavera y otoño. En algunos casos, estas caen en forma de granizo. Y, ocasionalmente, el tamaño de los trozos de hielo daña todo lo que se encuentra a cielo abierto, como campos de cultivo, coches u hogares.

Era una de las contingencias en que pensaba Antonio Monteagudo Hernández, residente del municipio valenciano de Beniparrell, cuando contrató su seguro de hogar con Línea Directa.

"¿Cómo que no entra?"

El pasado mes de septiembre cayó pedrisco. "La verdad es que hacía años que no veía uno tan fuerte", enfatiza el afectado. Las placas de policarbonato con que cubre la terraza de su casa a modo de lucernario quedaron llenas de agujeros. Por ello, siguió el procedimiento habitual: apertura de parte con Línea Directa y evaluación de daños in situ con el perito, en este caso de la subcontrata Servivac. Confiado, quedó a la espera de respuesta.

"¿Cómo que no entra?", se pregunta aún Antonio cuando repasa lo ocurrido, reviviendo la sensación de escándalo. Y es que su aseguradora le negó cualquier tipo de indemnización. Y eso que en el contrato de la póliza, en una tabla de resumen, figuraba claramente, con un 100 % de cobertura: "Fenómenos atmosféricos: viento lluvia, nieve, inundaciones y pedrisco".

"Me parece vergonzoso. No lo voy a dejar así y además lo vais a perder", recuerda que se dijo a sí mismo. "Intenté resolverlo por mi cuenta por la vía de la lógica", prosigue. Trató de hacerse oír varias veces por teléfono, sin éxito. Finalmente, recurrió a FACUA Comunidad Valenciana, de la que es socio desde hace años.

Con la ley en la mano

En su concienzudo escrito de reclamación, el equipo jurídico de la asociación argumentaba con leyes lo que parecía tan evidente desde cualquier punto de vista. Así, echaba mano del Código Civil, la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios o la Ley de Contrato de Seguro, vigente desde 1980.

El artículo 18 de esta última dicta que "en cualquier supuesto, el asegurador deberá efectuar, dentro de los cuarenta días, a partir de la recepción de la declaración del siniestro, el pago del importe mínimo de lo que el asegurador pueda deber, según las circunstancias por él conocidas", y que, si el asegurado consiente, se puede sustuir el pago por la reparación o reposición del objeto siniestrado.

Tras recibir el texto, Línea Directa se avino a pagarle 228 euros, una cantidad "ridícula", según Antonio, que hacía poco que había cambiado las placas de su terraza por 1.200 euros contando con la mano de obra.

FACUA insiste, y gana

Ante esto, la asociación envió un nuevo escrito, en el que planteaba a la aseguradora dos opciones: o bien reparaba ella el lucernario, o bien aceptaba uno de los dos presupuestos buscados por el afectado: uno por 1.350 euros y otro por 3.025.

Finalmente, Línea Directa ha transigido en cumplir con el contrato suscrito y le ha abonado, como era de esperar, los 1.350 euros a su asegurado.