Un sistema de desgasificación con combustión en antorcha sella definitivamente el vertedero de Tales
El sellado ha consistido en la impermeabilización obligatoria en superficie y en la posterior revegetación para su integración paisajística. El sistema de desgasificación del vertedero consiste en ocho chimeneas perforadas a profundidades de 8 y 10 metros, todas ellas conectadas a dos estaciones secundarias que por aspiración mandan el biogás a un estación primaria que lo canaliza a la antorcha donde se quema el gas, con una importante colaboración a la reducción de la emisión de gases efecto invernadero.
El esfuerzo compartido entre la Diputación de Castellón y la Mancomunidad Espadan-Mijares ha permitido explotar esta instalación de eliminación de residuos no peligrosos con un aprovechamiento máximo de su vida útil en óptimas condiciones y llevar a cabo su sellado en la mejor de las situaciones, incluso con un sistema de desgasificación perfectamente dimensionado a las características de la instalación que nos asegura un máximo rendimiento.
Previamente a la actuación del sellado la diputación contrató el estudio de calidad del biogás por un importe de 6.000 euros, con el objetivo de determinar la tipología de antorcha a instalar para la combustión de los gases. También se contrató la ejecución de la red de piezómetros para el control de las aguas subterráneas, con un total de 5 pozos, por un importe de 36.000 €.
Vida útil
La capacidad útil de esta instalación tras tres ampliaciones en base a un plan de acondicionamiento de la institución provincial ha sido de 20.000 metros cúbicos en una primera fase y de 88.000 metros cúbicos en fases posteriores. El coste económico de dichas ampliaciones fue asumido por la institución provincial con una inversión total de 480.000 euros. En los tres últimos años de su vida útil llegó a recepcionar 25.000 Toneladas por año de residuos urbanos, al aceptar los residuos procedentes de la comarca del Alto Palancia y parte de municipios de la Zona I y Área de gestión 2 de Zona III y VIII, que en ese momento no tenían instalación de destino autorizada
A partir de marzo del año 2008 los municipios que entraban en el vertedero de Tales, comienzan a destinar sus residuos a otras instalaciones, a excepción de la Mancomunidad Espadan-Mijares que deja de aceptar residuos en agosto de 2009, dando por finalizada así su vida útil.
Paralelamente la diputación desde su departamento de Medio Ambiente, desde el inicio de la actividad de esta instalación y como titular de la misma, ha estado llevando a cabo el Plan de Control y Vigilancia de obligado cumplimiento según ley y Autorización Ambiental Integrada a través de la contratación con IPROMA entidad colaboradora de la administración en materia de medio ambiente, el control de las aguas subterráneas, emisión de gases y caracterización de lixiviados, actualmente por un importe aproximado de 15.000 €/año.
.
