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La Planta de Tratamiento de Residuos de Cervera estará operativa a partir de 2012

La Planta de Tratamiento de Residuos de Cervera estará operativa a partir de 2012

    “La próxima reunión del Consorcio de Residuos de la Zona Norte tendrá lugar en las instalaciones de la Planta de Tratamiento de Cervera”. Así lo ha anunciado el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, tras la reunión que se ha celebrado en el Ayuntamiento de Benicarló y en la que se ha anunciado que a partir del dos de enero “estaremos ya dando servicio de tratamiento de residuos a todos los vecinos de la provincia con la entrada en funcionamiento de una planta modélica en su funcionamiento y que nos permitirá mejorar nuestra eficiencia y optimizar el tratamiento de residuos”.

    Javier Moliner cumple así su compromiso de “conseguir que la provincia pueda ser autogestionar todos sus residuos e, incluso, ser capaces de tratar también los de otros territorios. Igual que otras provincias han sido solidarias con Castellón hasta ahora, nosotros también lo estamos siendo ya con una quincena de municipios de la provincia de Valencia”.

    En la reunión del consorcio se ha anunciado que la previsión es que todos los municipios del consorcio estén tratando ya sus residuos el dos de enero en la planta de Cervera. No obstante, la semana que viene se empezará a tratar las basuras de algunos municipios si el acceso por los nuevos viales lo permiten. El objetivo es que se acceda ya por la zona de costa, con lo que las pruebas de carga de la planta se podrían incrementar.

    En las pruebas de puesta en marcha que se está realizando actualmente, están accediendo a la planta los camiones que transportan las basuras de municipios pequeños de las zonas limítrofes por el interior a la planta, como son Cervera del Maestre, Traiguera, La Jana, Canet lo Roig, Rossell, San Rafael del Río, Càlig, Sant Mateu, Xert, Salzadella, Tírig, Catí, Torre Endomenech o la Sarratella, principalmente.

    La recogida de está agrupada en dos rutas que cubren dos camiones diariamente desde hace algunos días. Al margen de esto, el consorcio está acondicionando el vial Peñíscola-Càlig, en el término municipal de Peñíscola, que permitirá el acceso a la planta de Cervera de los municipios más grandes de costa, así como el resto de municipios.

    Igualmente, el consorcio también mejorará y acondicionará el acceso norte a la planta –el vial Peñíscola-Càlig, en el término municipal de Càlig-, para mejorar el acceso de los dos recolectores indicados anteriormente, así como las rutas de recogida de Els Ports, que accederán a través de la planta de transferencia de Vilafranca del Cid o bien directamente, según corresponda.

    Moliner, que preside los tres consorcios de la provincia, también ha destacado que "terminamos el año con las tres plantas en marcha, con el 100 % de los habitantes de la provincia que tienen tratadas sus residuos dentro del territorio castellonense y con la capacidad total de tratar todo lo que se produzca, y desde la Diputación de Castellón seguiremos trabajando por mejorar este servicio al ciudadano".

    El presidente provincial decidió asumir la responsabilidad de copresidir los tres consorcios “para garantizar la mayor coordinación entre las tres plantas y que podamos actuar con toda la diligencia que nos exigen los ciudadanos en el caso de que alguno de los consorcios tenga algún problema puntual”.

    Hay que recordar que Moliner ha pacificado en apenas seis meses una de las áreas que más polémicas había generado los últimos años, y que lo ha hecho con el consenso casi unánime de todos los ayuntamientos de Castellón. “Desde que asumí la presidencia anuncié que quería sacar el problema de las basuras del debate político. Nuestros vecinos no quieren vernos peleándonos, sino solucionando sus problemas”.

    Asimismo, el consorcio va a implantar una serie de campañas ambiciosas de fomento del conocimiento de las instalaciones, así como potenciar la recogida selectiva en origen, así como dotará a todas las unidades urbanas de una ‘tarjeta verda d'ús gratuït’. A través de la campaña ‘Si + recicles, - pagues’, el consorcio bonificará económicamente a los vecinos que mayores aportaciones realicen a los ecoparques. Y todo ello a través de un sistema de control de pesajes e informatización que se instalará en los ecoparques durante el primer cuatrimestre de 2012, repartiéndose asimismo, la tarjeta con la carta explicativa.

    Asimismo, la red de ecoparques fijos se mejora con seis nuevos ecoparques móviles, también informatizados, que pretenden acercar el servicio al ciudadano e incrementar la recogida selectiva, dotando de un refuerzo del servicio en los municipios de costa y de un servicio más cercano en los municipios de interior del consorcio.

    Por otro lado, respecto al fomento de las políticas de recogida selectiva en origen, el consorcio implantará una terna de bolsas de rafia para facilitar el reciclado en las viviendas del consorcio, a través de todas las unidades de todos los municipios. Además, también colaborará con los ayuntamientos en la compra de contenedores para la recogida selectiva.

    “Y todo ello, fruto del esfuerzo y consenso de todos”, ha explicado Javier Moliner. Aprovechando el trabajo de los últimos años, el actual equipo de gobierno ha llevado a la provincia de Castellón a ser la primera provincia de la Comunidad Valenciana en disponer de todas las infraestructuras de tratamiento de residuos urbanos necesarias. Además, el consorcio de residuos del plan zonal 1, pionero en la implantación global de todas las infraestructuras de gestión (plantas de transferencia, planta de tratamiento y red de ecoparques) y pionero en la Comunidad Valenciana en el sistema de informatización de la red de ecoparques, que permite la implantación de las bonificaciones por reciclado.

    Y la provincia de Castellón es autosuficiente ya hasta tal punto que la planta de Algimia de Alfara tratará hasta 35.000 toneladas anuales de residuos urbanos procedentes del Consorcio Valencia Interior, quien abonará 1,5 millones de euros por el servicio de valorización y eliminación. Una solución provisional y transitoria hasta que finalice la construcción de sus instalaciones y que se prolongará hasta el 31 de diciembre de 2013.

    En total serán 55 los municipios de la Comunitat Valenciana que pasará a gestionar la instalación de residuos de Algimia de Alfara. De ellos 40 pertenecen a la provincia de Castellón (29 procedentes del Alto Palancia y Alto Mijares y 11 de la Plana Baixa) y 15 de la provincia de Valencia (15 municipios del Camp de Morvedre). Todos ellos se beneficiarán de la simplificación de trámites y demás ventajas que permite la economía a escala. Uno de los más evidentes es que los costos unitarios de producción disminuyen al aumentar la cantidad de unidades producidas.

    El precio a aplicar por las operaciones de valorización será de 43,16 euros por tonelada, de los que la base será 39,97 euros y el resto corresponde al IVA. La cifra de 1,5 millones de euros es el resultante de la máxima cantidad de tratamiento aplicada, 35.000 toneladas anuales. Además, el acuerdo contempla ejercer el derecho de compensar los rechazos depositados, en el vertedero de Algimia de Alfara, en el vertedero del Consorcio de Valencia Interior cuando entre en funcionamiento.

    Actualmente, la instalación de Algimia cuenta con una capacidad de tratamiento de 120.000 toneladas anuales que presta servicio a 210.000 habitantes de 56 municipios de las comarcas del Alto Palancia, Camp de Morvedre y parte de la Plana Baixa.

    En su puesta en funcionamiento se han invertido 30 millones de euros y se han generado 30 puestos de trabajo. La planta cuenta sus dos líneas de tratamiento: una destinada a la valorización de mezclas de residuos municipales, y la segunda para residuos orgánicos procedentes de la recogida selectiva municipal. El vertedero cuenta con un sistema de desgasificación del vertedero compuesto por una red de pozos verticales conectados mediante un sistema de tuberías que canaliza el biogás hasta la antorcha.

    La ordenanza contiene una ecotasa que significa la implicación de los ciudadanos en la gestión de los residuos. Así, los ayuntamientos serán los encargados de distribuir unas tarjetas verdes que servirán para acceder a los ecoparques que se pondrán en marcha. A razón del baremo que establezca cada consistorio, el ciudadano irá acumulando puntos en función de sus aportaciones al ecoparque.

    La medida, novedosa en la gestión de residuos valenciana, supone que cualquier vecino puede autogestionarse la tasa de tratamiento de residuos. A final de año, se sumarán y se le premiará con reducciones en la factura de la basura, que incluso pueden llegar a suponer coste cero. "El reciclaje es cosa de todos y nosotros queremos premiar a nuestros vecinos más comprometidos", señaló Moliner.

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