El PSPV cree que “con Barrachina vuelve la estética de la bronca y el menosprecio”
El PSPV de la provincia de Castellón lamenta que más de 24 horas después del menosprecio del portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando, al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig "Miguel Barrachina siga mudo y agazapado". Los socialistas de Castellón lamentan que "para poder estar al frente del PP de Castellón, Barrachina tenga que pasar por el trágala de tener que sonreír y callar cuando un sujeto como Rafael Hernando viene a Peñíscola a reírse de los valencianos".
Porque consideran los socialistas que "el problema no es Hernando haga mofa del President, que ya es grave en sí, sino que lo haga del término Puig, una palabra de la lengua de los valencianos, lo que es tanto como decir que Hernando vino a Castellón a reírse de la lengua de los valencianos y de su cultura".
Sucede además, que en su afán por menospreciar a todo lo que tiene que ver con la Comunidad Valenciana, el "deslenguado" portavoz del PP en el Congreso no reparó en que la propia presidenta del PP, Isabel Bonig, también tiene un apellido que acaba en 'g'. "Nos parece lamentable que Barrachina siga escondido y sin abrir la boca, no vaya a ser que Rajoy se enfade". "No es capaz de defender ni a su propia jefa, por lo tanto, Barrachina no es un tipo de fiar".
El Partido Socialista de Castellón comprueba "con tristeza" que "Miguel Barrachina, en el acto de asunción del control del Partido Popular en Castellón, ha recuperado la estética de Carlos Fabra que creíamos superada, no solo por la obtención de mayorías a la búlgara, sino porque al invitar a Rafael Hernando a su acto de erección a la presiencia provincial, "ha dejado claro que la suya será una apuesta por la bronca y el mal gusto". Los socialistas consideran que Barrachina podía haber optado por muchas otras personas "pero prefirió ser ungido por un pandillero de la política como Rafael Hernando".
Y es que, creen los socialistas, "el liderazgo de Barrachina ya nace débil". Además de tener que tragarse a un "pandillero como Hernando", ha tenido que "soportar la visita del ministro de Fomento, que ha venido a vender humo con la A-7 y el Corredor, diciendo mentiras y contando que va a hacer lo que es imposible que haga porque no hay partidas para acometer esas obras en los presupuestos generales del Estado".
En el PSPV dicen que "Barrachina parece un alma en pena, obligado a votar esta semana durante la tramitación de las enmiendas a los Presupuestos en contra de los proyectos de Castellón, y obligado ayer en Peñíscola a aplaudir las mentiras y el ninguneo del ministro de Fomento". Y es que Iñigo de la Serna se lo dejó bien claro ayer a Barrachina en su propia cara: El AVE va para largo, tan para largo, que "los socialistas creemos que no llegará ni en 2017".
