La Diputación dedicará 100.000 euros para ayudar a las familias con problemas para pagar sus facturas energéticas
La Diputación de Castellón ha renovado en 2016 su compromiso para ayudar a las familias que peor lo están pasando en la provincia con una importante ampliación de su presupuesto en el área Social. Una de las grandes apuestas incluidas este año por el Gobierno Provincial en sus presupuestos es la de ayudar a las familias más desfavorecidas, por lo que ha incluido una partida específica de 100.000 euros para combatir la pobreza energética.
De esta manera, el ejecutivo presidido por Javier Moliner podrá ayudar especialmente a las familias con menos recursos del interior de la provincia a pagar sus facturas de luz y gas en los momentos más complicados del año. Esta iniciativa beneficiará especialmente a familias de los pueblos más pequeños del interior de la provincia, que es donde sufren de forma más intensa los rigores del invierno.
La diputada responsable del área Social, Elena Vicent-Ruiz, ha explicado que “en la Diputación somos conscientes de que hay muchas familias que tienen problemas y por eso hacemos un importante esfuerzo económico al dotar de 100.000 euros una línea de ayudas para estar al lado de las familias que menos recursos tienen”.
La Diputación de Castellón destinará en sus presupuestos de 2016 3.392.798 euros más a iniciativas sociales al elevar a 36.102.159 el capítulo social, que ya supone el 27,7% del total de las cuentas provinciales. Aumentan las partidas presupuestarias más importantes, como los 23,8 millones que destinará al Hospital Provincial de Castellón (22,4 en 2015), o los más de 3 millones de euros que destinará a la educación especial y al centro de acogida en Penyeta Roja.
La actuación de la Diputación en Acción Social se traduce en iniciativas como los 300.000 euros de la convocatoria pública de subvenciones a 150 asociaciones y entidades prestadoras de servicios que trabajan por la mejora de las condiciones de vida de los colectivos más vulnerables de la provincia. Otra partida importante se dedica al mantenimiento de los equipos base de servicios sociales que, con 300.000 euros de la Diputación, prestan asistencia a 107 municipios de la provincia.
